Cómo decorar con mosaicos
Muchos de los objetos que forman parte de la
decoración de los ambientes pueden resultar a menudo poco atractivos… mesas
de jardín, espejos y macetas, en ocasiones resultan apagados, viejos o sin
brillo…
Una solución para darles un toque de color y personalidad es aplicar sobre ellos algunas técnicas que los renueven y presenten como nuevas piezas de decoración.
Una de esas técnicas es el mosaico, que con siglos de antigüedad en su uso sigue resultando una de las manualidades más vistosas y actuales utilizadas en la decoración de la casa.
Este arte de realizar composiciones o dibujos con teselas o pequeñas piezas de cerámica o vidrio, puede trasladarse a cualquier elemento deseado, desde paredes o suelos hasta lámparas, espejos y hasta piscinas, donde es habitual ver cómo los mosaicos pueden cambiar el estilo y la personalidad de diferentes objetos.
Así, por ejemplo, cuando se rompe en el hogar un objeto de cerámica, podrán reciclarse sus pedazos para decorar otros objetos y siguiendo algunos pasos y consejos muy simples, se podrá logar un resultado asombroso con pocos materiales y mucha imaginación.
Con los mosaicos se pueden realizar patrones de formas y color para realizar murales, vitrales o cuadros, ofreciendo una alternativa diferente para decorar objetos en pasos simples:
1) Seleccionar las piezas rotas para combinar en la forma deseada
2) Seleccionar el objeto para decorar
3) Buscar un buen pegamento, cortador de cerámica y guantes de látex
4) Observar que la superficie del objeto esté limpia y seca
En caso de que falten piezas, por necesitarse formas muy específicas, se pueden comprar en locales que venden azulejos, cerámicas y vidrios.
Lo ideal es que luego de recubrir la pieza con los mosaicos, se logre un resultado uniforme en lo relativo al color y el diseño que se haya elegido.
Es importante tener en cuenta el espacio o ambiente donde se colocará la pieza decorada, de modo tal que combine con el diseño elegido.
Siguiente: Como hacer artesanías con mosaicos