5 consejos para comprar un auto nuevo
1. Busque el precio
en que las empresas fabricantes venden el auto a las concesionarias. Una vez que
usted sepa este dato, podrá conocer lo que el comerciante le está cobrando de
comisión por la venta, y saber si el precio es ajustado ó no.
Si es más del seis por ciento, es muy probable que esté haciendo una mala compra. Asegúrese de que la información que consiga sea correcta y esté actualizada.
2. Recorra todas las concesionarias posibles, ya que los precios que le ofrecen entre una y otra pueden variar más de un diez por ciento. Además, esté preparado para negociar. Ningún precio es fijo, y todo depende del mercado. Pida primero una rebaja abultada, para tener luego más margen de negociación.
3. No se deje tentar por las versiones caras. Muchas veces, los autos se presentan en una versión “base” y una versión “full”. Las diferencias en las prestaciones suelen ser mínimas, (llantas, tapizados, consola), pero usted pagará el doble de lo que le saldrían hacer esos cambios (que por cierto suelen ser bastante innecesarios) en un taller mecánico de confianza.
4.
No contrate servicios adicionales. Muchas veces, los vendedores
justifican el elevado precio de los autos que venden por una garantía extra que
da su concesionaria.
En realidad, lo único que importa es el “service” oficial de un año o seis meses
que dan las automotrices. Pasado ese lapso, verá como las mismas personas que
antes lo atendían con sonrisas, permanecerán indiferentes a sus reclamos, y solo
le harán arreglos simples, desentendiéndose por completo de los costosos.
5. Si usted entregará como parte de pago su auto usado, no mencione este punto hasta haber convenido el precio del auto que va a comprar. Es la única forma de saber el precio real del cero kilómetro y de su usado, ya que cuando se negocia desde un principio con ambos autos, no queda muy en claro cual es el precio de cada uno de ellos.
Por último, un par de sugerencias extras: intente comprar su cero kilómetro durante los últimos meses del año, ya que cuestan menos por patentarse con el año que está terminando.
No se “ate” a una marca determinada por tradición, busque
todos los tipos de marcas del modelo que desea, sin caer en infundados
prejuicios. Hoy en día, un auto lujoso no tiene por que ser el más caro, ya que
casi todas las marcas “top” tienen versiones económicas.