Cómo evitar que te estafen en una venta telefónica
La mayoría de las ventas por teléfono son hechas por negocios legítimos que
ofrecen productos o servicios legítimos. Sin embargo, el fraude telefónico es un
negocio multimillonario que involucra desde el ofrecimiento de negocios
“maravillosos” (y fraudulentos), a la venta de productos y servicios falsos, con
fallas o que no cumplen lo que prometen. Si usted tiene teléfono, podría
ser una víctima del fraude de las ventas por teléfono. Si se vuelve una víctima,
es algo que depende de usted. Prepárese para manejar al estafador que podría
estar llamando de modo adecuado, para que no sea su próxima víctima. Por otro lado, no sólo de los
estafadores profesionales viene el peligro. La competencia extrema que se da en
determinados rubros comerciales lleva a muchas empresas a intentar conseguir
clientes a cualquier costo. Ese costo, muchas veces, termina pagándolo el mismo
cliente, y no la compañía que lo llama. Política de engaño premeditado,
“travesuras” de empleados deseosos de una mayor comisión o desorganización
interna son explicaciones posibles, pero el caso es que, la mayoría de las
veces, “el cliente nunca tiene la razón”. Y marche preso. Lo
que usted debe saber sobre el fraude en telemárketing
No hay
ninguna manera de determinar si una llamada de ventas es legítima
simplemente hablando por teléfono con alguien. Antes de invertir o comprar,
verifique siempre la autenticidad del negocio u organización. Es probable que los estafadores
telefónicos sepan de usted más de lo que usted sabe de ellos. Dependiendo de
dónde hayan conseguido su nombre, pueden conocer datos como su edad,
ingreso, salud, aficiones, ocupación, el nivel de educación, el estado
matrimonial, y si ha hecho compras telefónicas en el pasado. Ellos asumen
que usted está interesado en aprovechar una ganga y que es sensible a ayudar
a las personas necesitadas. Los telermárketers de ventas
fraudulentas tienen experiencia en crear impresiones falsas y engañosas y
son expertos en camuflaje verbal. Los telefonistas están bien adiestrados
para "decir cualquier cosa" que los lleve a conseguir su negocio. Los estafadores son extremadamente
buenos en parecer como si representaran negocios legítimos. Usted puede ser la persona que
"inicie" la llamada telefónica. Es común para deshonestos telefónicos usar
directamente e-mails y anunciar en publicaciones de prestigio para solicitar
su contacto. Raramente se les devuelve el dinero
a las víctimas de fraudes telefónicos.
Las pistas que indican que un telemárketer
podría ser un estafador
1.
Los telefonistas usan tácticas de venta de alta presión. ¡Ellos insisten
a menudo para que usted tome su decisión ahora mismo!
2.
Si una oferta parece ser demasiado buena para ser verdad, abra bien los
ojos!.
3.
Un pedido de su número de tarjeta de crédito para cualquier otro
propósito que para hacer una compra.
4.
Los telefonistas ofrecen enviarle a alguien a su casa o negocio para
buscar el dinero, o algún otro método fuera de lo común para conseguir su dinero
rápidamente.
5.
Una declaración que algo es "gratuito" seguida de un requisito para pagar
de alguna manera para conseguir su artículo gratuito.
6.
Una inversión que es "sin riesgo."
7.
El telefonista no está preparado para proporcionarle información escrita
o referencias (como de bancos o nombres de clientes satisfechos con sus
productos).
8.
Cualquier sugerencia que usted deba hacer una compra basada sólo en la
confianza.
9.
Cualquier premio que tenga que ir a retirar en persona y con su tarjeta
de crédito como condición excluyente.
Cómo evitar volverse una víctima
Nunca permita ser empujado a tomar en una decisión en forma apresurada.
No
haga ninguna inversión o compra que no entienda totalmente.
Pida información escrita por correo sobre el producto, servicio, inversión o
caridad y sobre la organización que lo ofrece. Éste no debe ser un problema
para las empresas legítimas.
Pregunte qué dependencia estatal regula la empresa o necesita su registro.
Pida el número de teléfono o la dirección de las mismas.
Verifique la existencia de la compañía u organización. Los estafadores
asumen que usted no se molestará en hacer esto.
Consulte una segunda opinión. Envíe la información para su revisión a su
contador, banquero, o abogado.
Pregunte qué recurso puede tomar en caso que realice una compra y no esté
satisfecho. Consiga cualquier garantía por escrito.
Cuídese de los testimonios que usted no pueda verificar. No
dé información financiera personal por teléfono. Esto incluye, sobre todo, a
su tarjeta de crédito y a su número de documento. ¡Si
usted no está interesado, está siendo sometido a altas técnicas de presión o
se siente incómodo con la llamada, simplemente cuelgue! Si
le venden algún servicio (como una línea de teléfono, acceso a Internet,
telefonía celular, etc.) compruebe que todo lo que le prometieron
telefónicamente este especificado en el contrato que le dan para firmar. Si
no lo está, no acepte ninguna excusa y rechace el servicio. No se preocupe
por “el pobre muchacho que se molesto hasta mi casa por nada”. En algunos países, la regulación
exige que los telemárketers se registren en un organismo oficial. Además, los
vendedores telefónicos necesitan enviar facturas escritas a los clientes y
obtener las firmas antes de deducirles los gastos de sus cuentas. Si usted
piensa que ha sido contactado por un estafador del telemárketing, avise al
Servicio de Protección al Consumidor de más fácil acceso para usted.
¡Usted no sólo estará protegiéndose a sí mismo, sino también a otros!