El mundo informático se ha revolucionado en los últimos años con el éxito de los
dispositivos móviles y también con el gran impulso que han tomado las tablets,
especialmente luego del suceso que causó el
iPad.
Pero no ha sido solo la tableta creada por Apple la que gana lugar en el
mercado. Muchas empresas han comenzado a fabricar este tipo de dispositivo,
ofreciendo una gran diversidad de modelos y también variedad en los precios.
Mientras que iOS es el software utilizado por los dispositivos Apple, Android es
el sistema operativo que han adoptado mayoritariamente el resto de las empresas
que desarrolla tablets. Asus, Motorola, Samsung y Sony son algunas de las marcas
líderes que han apostado por Android como sistema de sus tablets.
Seguramente al leer estas líneas nos ha entrado la curiosidad por las tablets y,
si aún no tenemos una, pensaremos en la posibilidad de adquirir un modelo que
esté al alcance de nuestro bolsillo.
En esta nota profundizaremos en cómo dar los primeros pasos luego de comprar una
tablet compatible con el sistema Android.
De la caja a nuestras manos
Uno de los primeros pasos que deberemos realizar luego de desembalar nuestra tan
ansiada tablet será darle la carga inicial a la batería.
En estos casos siempre
será recomendable consultar en el manual cuáles son las recomendaciones del
caso. La carga inicial suele ser de un lapso más prologando que las siguientes
cargas.
Si bien la mayoría de los cargadores hoy en día funcionan con diferentes
voltajes, es importante verificar que sea compatible con nuestra línea eléctrica
doméstica (220v o 110v son las posibilidades, según el país).
Una vez que la tableta tiene la carga completa, podremos proceder a prenderla.
En algunos modelos el botón de encendido requiere que sea presionado por algunos
segundos para que arranque el equipo. En unos instantes el sistema cargará y
estaremos listos para dar los primeros pasos.
El teclado y los dedos
Algunos modelos de tablets cuentan con la posibilidad de incorporar accesorios,
desde fundas de cuero, hasta teclados, pasando por otros
gadgets interesantes
son una buena alternativa para potenciar este dispositivo.
Respecto al teclado, la opción de un teclado “físico” es atractiva ya que nos
permite utilizar el dispositivo como una pequeña computadora muy portátil.
Pero en algunas ocasiones nos será más cómodo y portable optar por utilizar
nuestra tablet sin el teclado físico, en cuyo caso optaremos por usar el teclado
virtual, que se muestra directamente en pantalla y lo podremos pulsar utilizando
nuestros dedos.
De manera predeterminada, el teclado virtual se mostrará cada
vez que accedamos a un área en la que está definida la posibilidad de escribir.
Por defecto, el teclado virtual se verá en la parte inferior de la pantalla.
También deberemos recordar que si bien algunos modelos cuentan con un lápiz
siempre podremos acceder a las opciones de la tableta mediante el uso de
nuestros dedos.
Uno de los primeros aspectos al que deberemos acostumbrarnos es
a adaptarnos a la sensibilidad de la pantalla y eso dependerá de cada
dispositivo, ya que existen algunas del tipo resistivo y otras del tipo
capacitivo.
Por lo general las primeras son menos costosas, pero también menos
sensibles y ofrecen menor brillo. En el caso de las capacitivas, cuyo valor es
mayor, encontraremos que pueden actuar con mejor presión de los dedos y
resultarán más sensibles a los movimientos que realicemos.
El mouse es parte del pasado para las tablets que ahora basan el accionar
principal en los dedos de los usuarios.
Configuración básica
Algunas de las opciones de acceso a configuración pueden variar dependiendo de
la versión del sistema y del dispositivo, pero generalmente las encontraremos
como las veremos a continuación. En este ejemplo nos basamos en una tableta que
cuenta con Android 2.2.
Una vez que accedemos al escritorio de Android y vamos a la sección donde se
ubican las aplicaciones. Tendremos un icono titulado “Ajustes” (“Settings” en
inglés).
Allí podremos configurar los siguientes aspectos:
– Ajustes de teclado y de idioma: si bien este no es el primer ítem que aparece
en este listado, resulta de gran importancia ajustarlo para tener correctamente
configurado el teclado y también contar con nuestro idioma definido para la
tableta.
– Conexiones inalámbricas: es muy importante si deseamos utilizar Internet con
nuestra tableta. Podremos detectar las redes presentes en el lugar donde nos
encontremos e indicar el usuario y contraseña para ingresar a Internet
– Sonido: tendremos la posibilidad de establecer los sonidos para diferentes
eventos y también el volumen, entre otras opciones.
– Pantalla: nos brinda la posibilidad de ajustar el brillo, permitir que la
pantalla gire cuando movemos el dispositivo, definir si las animaciones se
activarán y el tiempo de espera para que se apague la pantalla cuando el
dispositivo no está siendo utilizado.
– Ubicación y seguridad: nos permite establecer parámetros de seguridad para el
dispositivo, bloqueos y contraseñas. También aquí podremos especificar aspecto
de seguridad relacionados con acceso a redes y GPS.
– Ajustes de sincronización y de cuentas: es muy importante ya que debemos
asociar nuestro dispositivo a una cuenta de Google (por ejemplo a nuestra cuenta
de Gmail).
Esto resulta imprescindible poder aprovechar al máximo todas las
posibilidades del dispositivo, ya sea descarga de aplicaciones o lo relacionado
a correo, geolocalización y otras características vinculadas con Google.
– Privacidad: nos permite realizar o restaurar copias de seguridad del
dispositivo. También desde allí podremos restablecer la configuración de fábrica
si hubiera algún problema.
Otras opciones de configuración que podremos encontrar son: almacenamiento
(interno y de tarjetas externas), búsquedas, accesibilidad, fecha y hora. Además
podremos ver información sobre el dispositivo relacionada con la versión, el
modelo y el uso de la batería, entre otras funciones.
Incorporar nuevas aplicaciones
Si bien las tablets vienen de fábrica con una serie de aplicaciones, es de gran
utilidad poder sumar nuevas. El “Market” es uno de los iconos que tendremos
disponible entre las aplicaciones del escritorio de Android.
Al acceder a esta opción encontraremos una serie de aplicaciones y juegos
disponibles para descargar. Allí encontraremos versiones gratuitas y de pago.
También veremos la posibilidad de ordenarlos por categorías o utilizar un
buscador que nos permitirá encontrar lo que necesitamos.
Al elegir el programa que deseemos instalar podremos ver una descripción,
capturas de pantalla, valoración y comentarios de otros usuarios que lo hayan
descargado.
Si todo está correcto y resulta de nuestro agrado podremos proceder
a descargarlo e instalarlo. Simplemente deberemos leer y confirmar si estamos
de acuerdo con las características y funcionalidades a las que tendrá acceso la
aplicación. Luego la aplicación aparecerá como un icono en nuestro escritorio de
Android.
Con esto ya tendremos las herramientas básicas para poder dar nuestros primeros
pasos en el mundo Android con nuestra tablet.