De
interés por su carácter histórico, sobresalen en el área metropolitana algunos
sitios tradicionalmente visitados, como el Teatro Nacional, Museo Nacional,
Oficinas del Correo, Estación de Ferrocarril al Atlántico, Iglesia Catedral,
Parque Central, Edificio Metálico, Mercado Central,· Centro Nacional del Arte y
la Cultura (CENAC), parques
Morazán y
Nacional, Teatro Melico Salazar y Museo de los Niños.
En Cartago destacan la iglesia de Orosi y las ruinas de la iglesia de Ujarrás, y
en Turrialba (provincia de Cartago) el monumento de Guayabo.
Bellezas naturales
El tesoro
mas valioso de Costa Rica es la naturaleza, y de allí la abundancia de áreas
protegidas como los volcanes Poás, Iraza, Arenal y Rincón de la Vieja, las
playas de Manuel Antonio y Cahuita, los senderos de Carara o Braulio Carrillo,
el bosque seco de Santa Rosa, la vida submarina en las Islas del Coco y del Cano
y los montes de Chirripó.
Cada uno de estos parques representa centros vivos de biodiversidad, cuyos
parajes ofrecen las condiciones apropiadas para vivir una verdadera experiencia
formativa sobre la naturaleza y, dentro de la practica del ecoturismo,
participar con las comunidades locales, las cuales a la vez que se benefician
con la actividad, contribuyen para la preservación de los recursos naturales del
entorno.
El 25%
del territorio nacional pertenece a estas áreas protegidas y ahí rigen las mas
estrictas normas y reglamentos para el uso publico. Como poblaciones pioneras en
esta modalidad se destacan Monteverde en Puntarenas, Puerto Jiménez en la
Península de Osa, Tortuguero en Limón, la Fortuna de San Carlos en Alajuela y
Sarapiquí en Heredia.
Allí
predominan el servicio de las llamadas micro y pequeñas empresa locales y las
practicas de interacción con el medio ambiente, en la lucha constante por
fortalecer los valores culturales de la región.
Playas
Un
pequeño país, al que la naturaleza privilegió con creces no podría ser excepción
en cuanto a playas. Posee muchas y muy bellas, algunas incluidas en el sistema
de parques nacionales, lo que agrega un nuevo ingrediente a su atractivo, que ya
no se limita al disfrute de su calida temperatura, sino también a la observación
de la riqueza y exuberancia de sus paisajes tropicales.
Volcanes
Las que
por fuera no son sino formaciones montañosas naturales con su belleza escénica y
características iguales a cualquier otra Montana, por dentro a veces hierven e
irrumpen haciendo travesuras.
Son los
volcanes de Costa Rica, que conviene disfrutar, pero con precaución. Entre ellos
destacan el activo Arenal, que en las horas de la noche ofrece singulares juegos
pirotécnicos, de vista impresionante, y el Poás, que se dice tiene el cráter más
grande del mundo.
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