Los cánones de belleza han ido variando a lo largo de los siglos, convirtiéndose
en algo relativo y efímero ya que lo que para unos es bello para otros puede
resultar todo lo contrario. Hay personas que ven la belleza en el exterior
mientras que otras la ven en el interior.
Con la presión de los medios distorsionamos la realidad volviéndonos esclavas
intentando parecernos a mujeres que proyectan una imagen a través de su ejército
de asesores, maquilladores, peluqueros que no corresponde con la realidad,
llevándonos a bajar nuestra
autoestima.
El primer paso para potenciar tu atractivo es definir y buscar en tu interior el
concepto de belleza que tienes para después poderlo proyectar hacia el exterior.
Visualiza la imagen ideal de ti misma que quieres.
Vete a un lugar tranquilo,
cierra los ojos y con todo lujo de detalles empieza a pensar que imagen te
gustaría proyectar al exterior (color de pelo, tono de piel, uñas, ropa, etc…)
incluso la postura y modo de comportarte.
El segundo paso será utilizar la Técnica del Espejo, nos colocaremos delante con
objetividad, hasta el momento el espejo había sido nuestro gran enemigo, pero a
partir de ahora será nuestro mejor aliado para desvelar nuestros puntos fuertes
para enfatizar y nuestros puntos débiles para disimular.
Anota cuales son las
partes de tu cuerpo con las que te sientes satisfecha y cuales te gustaría
potenciar ó cambiar.
Anótalo en un cuaderno, ya que con éstos elementos
empezarás a trabajar y perfilar los resultados que quieres proyectar al
exterior.
El tercer paso y último una vez que hemos identificado lo que nos gusta y
queremos mejorar es tener la confianza, la motivación, fuerza de voluntad y
autoestima para conseguir nuestro objetivo a través de un “plan de acción”
específico fijado por nosotras mismas ó por un profesional que nos llevará a
conseguir nuestra meta deseada.
Recuerda, lo interior siempre se trasluce al exterior, cuando estamos felices lo
irradiamos al exterior, para proyectar nuestra mejor imagen no solo bastará con
nuestro aspecto exterior sino que irá de la mano con una transformación interior
que nos dará mayor seguridad en nosotras mismas para conseguir todos los cambios
que deseemos.
Durante el proceso puedes anotar en una lista las siguientes frases motivadoras
y tenerlas a la vista:
–
Soy única e irrepetible.
–
Mi potencial de cambio y fortaleza es infinito.
–
Me tengo que gustar a mi misma si quiero gustar a los demás.
–
Solo yo soy mi mejor juez, los demás no.
–
Respetarse a una misma es fundamental para lograr el respeto de los demás.
–
El espejo es mi aliado, no mi enemigo.
–
Me merezco lo mejor.
–
Nadie con su mirada ni críticas negativas puede destruir mi autoestima porque
está basada en mi percepción y no en la de los demás.
–
Querer es poder.
–
La transformación requiere constancia
Ten presentes estas estrategias y conseguirás superarte a ti misma.
Por
Lydia Collado Ramón
Aprende a
vencer la timidez
con la “Guía para
vencer la timidez y la ansiedad social en forma permanente”, que encontrarás
haciendo clic
aquí