Hoy en día, muchos eligen tapar sus canas y teñirse el cabello, pero pocos saben
cómo escogerlo. No debes confundirlo la moda con lo que nos favorece.
Escoger un color adecuado para nuestro cabello, no es cosa de juego, ni de moda;
el color es algo peligroso, donde la selección pone a prueba de fuego tu figura
y éxito, resaltando u opacando tus atributos y belleza física.
El color NO depende de la ropa o el estilo que
llevas, el color depende del tono de tu piel, eso incluye, cuando te bronceas o
en invierno que permaneces más pálida.
No juegues con inventos en los que después te
vas a arrepentir, o esos cambios que parecen lucir bien.
"Porque todo cambio llama la atención"… pero hay que ser consciente, no hay
necesidad de perder dinero, dañar el cabello y quedar ridículo sólo por intentar
colores que técnicamente no lucen juntos.
Existen 2 tonalidades para nuestra piel; cálida o fría. Para comprobar cual
tenemos, puedes utilizar tu brazo.
Si al examinarlos, ves tus venas de color verde u oliva tienes tonalidad
cálida. Si por el contrario, se ven azuladas o moradas, tienes una piel fría.