(Cita de Hernando García Mejía)
Había una vez un mundo maravilloso se llamaba ¨la tierra de los Pavos¨, eran Pavos felices e industriosos, pero había algo que los diferenciaba del resto de las demás especies de animales; por generaciones se ha transmitido un legado de incalculable valor a lo que ellos han llamado ¨La estrategia del Pavo¨.
Era un deber de cada familia preparar y enviar a sus hijos machos al descubrimiento de estas estrategias milenarias.
El Pavo Mayor, el más anciano de la comarca y por ende el más sabio, tenía una escuela en una tierra lejana, es ahí donde los pavos jóvenes aprendían todos los secretos para ser felices y lograr el éxito en la vida, era en el gran Oasis donde encontraban un legado de conocimiento que había sido transmitido de generación en generación y solo unos pocos lo conocían.
Todo estaba listo, los preparativos para la competencia más importante del año habían terminado, cientos de aprendices se reunían en la plaza, todos se mostraban ansiosos, a la gran mayoría les invadía el temor, bueno esto era normal ya que se enfrentaban a una experiencia desconocida; se decía que muchos eran los que iniciaban y pocos son los que regresaban con honor.
La hora de partir había llegado, se levanta de repente un Pavo de contextura fuerte y con aire prepotente levanta su voz y dice: -Silencio por favor, (todos quedan callados a la espera de recibir instrucciones..).¨
Mis queridos principiantes hoy es el gran día, todas las ilusiones de sus padres, líderes y maestros están centradas en ustedes; pero solo unos pocos valientes podrán alcanzar la meta.
A lo largo del camino encontrarán escondidas algunas claves que les servirán para continuar con la travesía; cada vez el tramo se tornará más complicado, muchos de ustedes regresarán sin haber concluido tal empresa, para los pocos que alcancen el nivel más alto, aquellos que lleguen al gran sabio regresarán con un tesoro de sabiduría el cual les proporcionará todas las estrategias para ser triunfadores.
Recuerden ¨Elévense por encima de sus debilidades, este es un principio de la excelencia¨.
Los pavos principiantes iniciaron su marcha, era una marcha lenta, y pausada, cada paso parecía meticulosamente pensado, el temor a ser descalificados prontamente les embarga.
Los Pavos llegaron exhaustos al primer objetivo, algunos creían que ya no podían más, de repente uno de los Pavos exclama emocionado – ¡ la encontré, la encontré, viva- había hallado la primera de las pistas estaba escrita en un madero – el Pavo que encontró el madero levanta su cuello y con voz fuerte lee lo siguiente:
El Camino se hace más difícil y empinado para aquellos que aún no han descubierto lo que quieren en la vida; descúbrelo en la profundidad de tu interior, y así notarás que la luz brillará en tu camino y tus pasos serán más livianos. ¨
Un silencio estruendoso parecía aturdirlos, ahora se enfrentan a su realidad, se confrontan así mismos:
• ¿Qué hago aquí? ¿Por qué decidí emprender este viaje?,
• en verdad no tengo las habilidades para llegar con éxito,
• soy muy gordo y pesado, como podré llegar a feliz termino,
• aún no hemos empezado y me siento cansado y sin fuerzas,
En medio del silencio que parecía infinito solo se escuchaban estas voces internas que hacían tambalear la determinación de los pavos principiantes.
102 pavos iniciaron la carrera, ahora se despiden treinta y dos, el resto continúa la aventura; los caminos son más empinados, la dificultad es mayor, se requiere de mayor fortaleza y determinación.
Después de varias horas de camino se encuentran frente a frente con la espesura de un bosque, pareciera que la naturaleza les hubiese creado una muralla de árboles que se muestra impenetrable.
Un hermoso Ciprés se levanta como un guardián, su imponencia y majestuosidad salta a la vista, en una de sus ramas se divisa lo que parece ser la segunda de las claves.
Uno de los pavos se ofrece a leerlo, con voz entrecortada debido al cansancio y la agitación dice:
¨El mayor de los obstáculos es el miedo, y este nace en el interior de cada ser, el miedo paraliza la acción, neutraliza nuestros sueños, destruye la esperanza. Vence tus miedos y podrás controlar tu destino.¨
Ingresar ahora a la espesura del bosque, no parecía muy alentador, este momento era propicio para probar la fortaleza y valentía de los pavos; ahora 43 de ellos decidieron devolverse pues el temor había sido más fuerte, no hubo quién les hiciera cambiar su determinación
Continuaron su camino por entre el fango y la espesura de la selva, sus patas se hacían más pesadas, la fatiga y el cansancio eran implacables; pero ellos sabían que si lograban vencer sus miedos estarían mejor preparados para recibir las enseñanzas del gran sabio, este objetivo los alentaba y los nutría espiritualmente aunque sus fatigados cuerpos trataban de hacerlos desistir.
La travesía parecía llegar al final, a pocos metros del grupo una luz radiante levemente se asomaba entre los árboles, algunos pavos al sentir que esta dura tarea terminaba aceleraron su paso; otros por el contrario se quejaban y manifestaban abiertamente que no podían continuar, el bosque de los temores los había derrotado.
En ese momento 18 Pavos más abandonaron la carrera, quedaron sin fuerza para continuar la marcha.
Los Pavos que aún quedaron divisan lo que sería la última de sus pruebas, la inmensidad del desierto parecía no tener fin, entre la vegetación y la arena se levantaba una gran roca de un color amarillo, en la cual estaba escrita la tercera clave, cada uno de los Pavos la lee para sí:
¨ Saca la basura de tu mente, para que el conocimiento la llene, los pensamientos llegan a ti como la arena del desierto e invaden tu ser interior, muchos son tan pequeños que no les prestamos atención, pero al final no permiten el espacio suficiente para que la sabiduría entre y permanezca por siempre.¨
En medio del desierto se encontraban los últimos pavos, caminando en medio de la nada, el sol implacable parecía quemar sus cuerpos, algunos empezaban a desistir de la ardua jornada, al final solo tres Pavos divisaron a lo lejos un hermoso Oasis, hemos llegado gritan al unísono con fuerte emoción, lagrimas de felicidad corren por sus mejillas, gritan y saltan como si no les faltara el aliento.
Cuando llegan al Oasis sale un Pavo completamente blanco, parecía que de su ser salieran rayos de luz; era semejante a un pequeño sol que iluminaba todo a su alrededor.
Bienvenidos – dice el pavo sabio- les felicito, han llegado al manantial de la sabiduría, a continuación recibirán el conocimiento para alcanzar el éxito.
Han sido valientes, y solo los Pavos que perseveran y luchan por sus sueños logran vencer.
Ahora les daré a conocer las Cuatro estrategias del Pavo, estas han sido transmitidas por miles de generaciones, pero solo unos pocos han tenido el privilegio de conocerlas, ahora ustedes tres serán instruidos en esta sabiduría milenaria.
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