Muchas piensan, y nosotros lo compartimos, que San Francisco es la ciudad más bella de los Estados Unidos, y una de las más interesantes por su diversidad y su rica vida cultural y económica.
Para que no desaproveches ni un minuto de tu visita a esta ciudad tan única, te invitamos a leer esta guía con todos los consejos prácticos que necesitas para que tu visita a San Francisco sea inolvidable.
Datos prácticos para planificar el viaje a San Francisco
Cómo llegar a San Francisco:
Indiscutiblemente la mejor opción es el avión. Para el turista, rentar un automóvil puede ser una opción si se dispone de mucho tiempo y se viene paseando desde (o si luego se irá hacia) Los Angeles y/o Las Vegas, pero siempre teniendo en cuenta que, como veremos más adelante, conducir en San Francisco puede volverse una tortura innecesaria.
Cuando esté por aterrizar en San Francisco, te sugerimos observar el paisaje por la ventanilla porque tendrás una vista panorámica inmejorable de la bahía y los puentes que la cruzan, así como de la pista de aterriza que termina bruscamente al borde del agua…
Desde el aeropuerto (SFO, o San Francisco Internacional Airport), dispones de varias líneas de autobuses y shuttles que te llevarán al centro de San Francisco.
Sin embargo, si no estás muy ajustado de dinero nuestro consejo es que te tomes un taxi. Cuantas más personas viajen menor será la diferencia de dinero con los autobuses, viajarás mas cómodo, no tendrás que estar subiendo y bajando el equipaje, y te llevará directo a la puerta de tu hotel.
El taxi cuesta alrededor de 30 dólares más propinas (un 10% es suficiente, y si no te gusta la atención del taxista, puedes no dejarle nada si no lo deseas), dependiendo del destino.
El importe final es el que marque el reloj tarifador, más el extra que corresponda por el equipaje y un cargo fijo por partir del aeropuerto.
Hay taxis-van para 5 o más personas y/o con mucho equipaje, y te recomendamos llevar anotados el nombre y la dirección de tu hotel, para el caso de que tu inglés (o el del taxista) no sean muy buenos.
Qué empacar para viajar a San Francisco
Olvídate de los preconceptos que puedas tener sobre la “soleada” California. La temperatura en San Francisco es templada todo el año: no suele hacer más de 21 o 22º C en verano (e incluso menos), y no suele descender más allá de 8 o 9º C en invierno.
Otro dato a tener en cuenta es que la temperatura puede sufrir grandes variaciones durante el mismo día, descendiendo de repente en verano o aumentando en invierno (sobre todo al mediodía, cuando hay sol).
Debes empacar, por lo tanto, algún abrigo aunque vayas en verano, y ropa liviana aunque vayas en invierno (acompañada por un abrigo que pueda quitarse y cargarse cómodamente a lo largo del día).
Y, claro está, olvídate de la playa (de todos modos, ¡ hay cosas mejores para hacer en San Francisco !)
¿Cuándo viajar a San Francisco?
Amén de que la temperatura no es muy diferente que en invierno, el verano tiene una gran contra: la niebla, que cubre gran parte de la bahía durante mucho tiempo y puede impedirte apreciarla en todo su esplendor.
Nuestro consejo: de ser posible, prefiere el invierno o el otoño para viajar a San Francisco, si no quieres ver todos los días el paisaje que muestra la foto:
Rentar un automóvil en San Francisco: ¿sí o no?
San Francisco es una ciudad relativamente pequeña y con la mayoría de las zonas de interés turístico muy cerca unas de otras.
Si a esto le agregamos que tiene un muy buen sistema de transporte público, y que el tránsito (y el estacionamiento) en las zonas que visitarás puede tornarse enervante (como en toda gran ciudad), nuestra recomendación es clara: es mejor no conducir en San Francisco.
Sin embargo, sí te sugerimos rentar un coche por uno o dos días para poder visitar los alrededores de San Francisco (sobre los que te contaremos más adelante), siempre que te guste conducir y no temas a los caminos de montaña.
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