Imagínate en un futuro venturoso viviendo la vida que deseas aplicando con persistencia esta primera clave de un pensar correcto.
Seguramente que tú también piensas en las cosas que deseas lograr en la vida, en realidad todas las personas lo hacen. Sí, hasta los que fracasan y no las logran también piensan EN sus objetivos.
¿Verdad que piensas en la casa en la que desearías vivir? O… ¿en ese viaje soñado que hace tanto tiempo deseas? O… ¿en la familia feliz con la que siempre imaginaste convivir? Pero eso no basta, no alcanza con que pienses EN tus metas!
Reflexiona: ¿por qué la mayoría de las personas a pesar de que piensan EN sus sueños no los alcanzan? ¿Cómo es posible que si piensan tanto en sus sueños no puedan lograrlos? ¿Qué diferencia a las personas que SÍ logran sus metas?
Las personas que logran resultados extraordinarios son personas que en determinado momento de su vida, por las más diversas razones y circunstancias, decidieron modificar su manera de pensar.
Algunas tomaron esa decisión conscientemente, otras sin darse cuenta, quizás por la influencia de un mentor o vaya a saber por qué motivos, pero en todos los casos hubo un antes y un después de un cambio en su manera de pensar.
PENSAR POSITIVO
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Las personas que piensan EN sus metas por lo general piensan en negativo, es decir expresan sus deseos no por lo quieren lograr sino por lo que no quieren lograr.
Por ejemplo si quieren conseguir un auto nuevo piensan y dicen frases de este tipo: “quiero cambiar este auto viejo que tengo”; “este auto ya no da más, lo tengo que cambiar”; “fíjate como está, otra vez lo tengo que llevar al taller, mejor lo cambio cuanto antes”.
Ese tipo de pensar enfoca la atención, la energía, los pensamientos en lo que se desea dejar atrás, es decir en lo que se tiene, no en lo que se desea conseguir, en lo que se tendrá.
¿Resultados? Atraen más de lo mismo. Sin saberlo utilizan la ley de la atracción en contra de lo que dicen desear, no piensan POR objetivos, piensan EN objetivos.
Las personas que piensan POR objetivos piensan en positivo, se enfocan en cómo va a ser su vida logrando las metas, imaginan las nuevas situaciones, cosas, personas que desean alcanzar.
Se estimulan permanentemente con una correcta visualización de sí mismos viviendo las metas, no hablan de cómo son sino de cómo serán cuando las logren.
Por ejemplo, si se trata de ganar más dinero, o de pagar cuentas, no piensan en lo que ganan sino en lo que van a ganar, no piensan en las cuentas que tienen que pagar sino piensan en la situación que vivirán sin cuentas pendientes.
Tienen un pensamiento positivo que describe la nueva situación de ingresos y de abundancia, hablan de ello con sus amigos, con la familia, pero sobre todo consigo mismos.
Verbalizan interna y externamente todo el tiempo frases del tipo: “qué bueno será cuando gane 5.000 dólares, estaré libre de deudas, tendré comodidad para pagar mis cuentas”; “como disfrutaré cuando en la empresa reciba el aumento que tanto deseo”; y todo el tiempo piensan POR sus objetivos en forma positiva enfocados en lo que quieren lograr, no en lo que quieren dejar atrás, enfocados en la nueva situación no en la actual. Se ven a sí mismos no como son, sino como llegarán a ser.
¿Resultados? La energía, la atención, organiza la vida en función de las nuevas realidades, poco a poco comienzan a suceder cosas que van materializando la nueva realidad.
Se vive con más alegría, se expresa un descontento feliz con la situación actual de la cual no se reniega, ni se critica, sino que se agradece mientras que a la vez se sueña con un futuro mejor.
Tienen entre sus frases favoritas haciendo de ella un principio fundamental:
“Hay una manera de hacerlo mejor, encuéntrala!”
Por Luis Ravizza
www.luisravizza.ws
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