La presentación de informes, folletos, transparencias y diapositivas con que ilustrarás y pondrás en conocimiento de todas las personas interesadas tus magníficas ideas son fundamentales en el proyecto.
Una fotocopia ilegible, una foto borrosa o un papel arrugado, pueden ser factores mas que negativos en la consideración del posible inversor o de quien decida por la viabilidad del proyecto.
Los detalles son la parte mas importante y la que definirá la preferencia por sobre otras propuestas que entren en competencia. Los datos expuestos deben ser los necesarios para entender de qué se está hablando, ni más, ni menos.
La información, sobre todo en grandes cantidades, solo logra desinformar. Siempre es aconsejable procurar que los asistentes a la presentación retengan los aspectos más importantes de tu plan de empresa.
Para ello, de debe seleccionar, en primer lugar, los temas que consideres indispensables para dar a entender su funcionamiento. Elígelos con sumo cuidado y no te vayas por las ramas.
Si se desea hacer ver a los posibles inversores y/o clientes la
rentabilidad
del proyecto, se recomienda utilizar gráficos antes que extensas líneas escritas sobre un buen número de folios. Cuando los datos se representan gráficamente, se entienden con mayor facilidad.
Los conceptos se fijan en la mente de quien los observa de forma fotográfica, como un todo global. Para que la información mostrada no sea malinterpretada, utilizar formas y colores que faciliten su lectura y comprensión. Si se busca llamar la atención y estimular, en los gráficos tonos rojos.
Este color se asocia al
dinamismo
y al poder. Transmite seguridad y confianza trazando bocetos en los que predominen diferentes gamas de azul. No así el amarillo y el naranja, pues suelen despertar en el subconsciente de las personas señales de alarma y peligro.
El dinamismo y el ritmo de explicación son armas necesarias para obtener el resultado deseado, y para eso es fundamental estar convencido seriamente de la utilidad y rentabilidad de la idea presentada.