El cuidado de las orquídeas

Se dice con justicia que la orquídea es la Ferrari de las flores, tanto por su belleza como por su costo y los cuidados que exige. Se podría escribir un libro al respecto pues, por otro lado, existen distintas variedades que necesitan condiciones diferentes para su cultivo.

-Primer
paso al comprar: tratar de elegir plantas que florezcan en diversas epocas del año.

-Salvo
el Cymbidium y el Cypripedium, que prosperan con tierras porosas, las demas
requieren tiestos con fibra de osmunda o material similar.

La fibra de osmunda consiste en raíces de canela mezcladas con helecho real
(Osmunda regalis), contiene todo el alimento necesario para dos años, aunque es
preciso agregar elementos que cuiden del drenaje.

Con estas flores,
lo más seguro es seguir utilizando el material en que vive la
planta cuando uno se convierte en su tutor.

-El
Cypripedium florece en temperaturas templadas, mientras que el odontogloso
necesita estancias frescas y los Vanda exigen temperaturas cálidas.

-Las
variedades más extendidas necesitan por lo menos cuatro horas de luz directa,
pero no sol fuerte, con temperaturas nocturnas de 13o a 18o, y 25o o más
durante el día.

-Debe
tener ventilación, incluso en invierno, siempre que no afecte a la temperatura
y se tenga cuidado con las corrientes.

-El riego, las pulverizaciones y el grado de humedad tienen una importancia
decisiva. Una vez que la planta da muestras de crecimiento y aparecen nuevas raíces,
hay que incrementar los riegos y las pulverizaciones.

-Las orquídeas absorben agua tanto a través de la superficie de sus hojas como
por las raíces.

-Mantenga
el tiesto en una bandeja humidificadora y deje que la tierra se seque un poco
entre riegos.

-Fertilice con abundante nitrógeno. Para agregar el fertilizante, riegue bien
antes de hacerlo. Use las medidas
exactas indicadas en el recipiente, sin agregar ninguna "propina" (en
estos casos, es mejor agregar de menos que de más, aunque suene extraño).
No fertilice en invierno (es la época de descanso).

Estas son las recomendaciones básicas, pero recuerde que las orquídeas son
plantas muy delicadas, que pueden dar grandes satisfacciones pero requieren de
muchos cuidados y dedicación.