Para
quienes tienen los conocimientos necesarios para fabricar velas artesanales,
queda solo saber comercializarlas y sacar el mayor provecho económico posible.
Para ello, debe analizar las conveniencias de tratar directamente con el
publico, o negociar con un comercio que se encargue de venderlas.
A
quien se puede vender
Los
organizadores de fiestas, congresos eventos y los decoradores son buenos
potenciales clientes y acceder a ellos es una buena forma de crear nuevos
enlaces con compradores menores.
En
las casas de decoración o en los negocios de venta de artículos religiosos,
las velas son elementos protagonistas, pero en general, se manejan con el
sistema de consignación. La mercadería queda para la venta y sobre las
unidades que salgan, se reparte un porcentaje entre el fabricante y el
comerciante.
La
reventa
Otro
sistema para entrar en el comercio de velas aromáticas, es revenderlas.
Caminando por Plaza Miserere, podrá encontrar artículos a bajo precio que podrá
reubicar beneficiándose con un porcentaje determinado por la diferencia de precio de compra y venta.
Adquiera
los productos mas atractivos a su gusto y fíjese la aceptación que tienen
entre sus clientes. Evalué el numero potencial de venta y renueve el stock. Lo
mas recomendable, es aprender a fabricarlas uno mismo, a medida que va
familiarizándose con los diferentes tipos de velas.
Luego
comience regalándole las primeras, a sus amigos y conocidos. Fíjese si las
utilizan y luego comience a ofrecer mas a las mismas personas y a quienes hayan
estado interesados en su producto.
Un
método efectivo es adjuntar a las velas, pequeñas etiquetas de cartón
decorado, sus datos personales y una marca, con la cual lo puedan identificar.