No existe un momento puntual recomendado para salir a
correr. En estos tiempos,
el tener una hora libre es para muchos un privilegio que hay que aprovechar y
hacer rendir lo máximo posible.
No se pueden negar los beneficios de hacer deporte en plena luz del día y de
cara al sol. Sin embargo, la noche brinda otras características que no pueden
dejarse de lado. A muchas personas, la oscuridad ayuda a la concentración.
Se está más tranquilo después de una ardua jornada de trabajo y se puede obtener
mayor eficacia en el resultado previsto. Lo cierto es que correr de noche
requiere de precauciones que si se realizara actividad física durante el día
pasarían inadvertidas.
En primera instancia, es importante que todo el mundo pueda advertir la
presencia del corredor. Es fundamental poder prevenir accidentes y también como
motivo de seguridad general.
Otro de los factores a tener en cuenta es la vestimenta
seleccionada. Ésta es
mejor que sea llamativa. Evitar los colores oscuros como negro o gris. Si no se
dispone de prendas de este tipo lo más conveniente es cargar con una señal
luminosa que ayude a destacar la presencia.
Otra de las sugerencias que hay que tener en cuenta es el sitio donde se saldrá
a correr. Es de vital importancia frecuentar lugares conocidos. No es buena
opción el salir a correr de noche por un sitio desconocido.
Es mejor que el recorrido esté lo más iluminado posible y que se conozca muy
bien. Las buenas condiciones del asfalto son básicas para poder desarrollar la
actividad sin que se presenten incidentes o posibles lesiones.
Durante la noche puede existir un grado de riesgo mayor. No hay que olvidar
llevar el documento y el teléfono móvil si se dispone de él en caso de necesidad
o de urgencia.
A veces no hay otra alternativa que salir a ejercitarse en
soledad, pero si se dispone de un amigo o familiar que puedan servir de compañía
sería lo ideal.
El escuchar música puede llegar a ser un error ya que se estará privando al oído
de percibir aquello importante como avisos de otros ciclistas o automóviles y
también quita mucha concentración en el recorrido que se está siguiendo.
Asegurarse de llevar las prendas de vestir adecuadas y ser precavido. Hay sitios
en los que suele llover más por la noche. Hay que tomar en cuenta esta
circunstancia para no enfermarse.
Si la persona trabaja en diferentes turnos, habrá días en los que tendrá que
verse en la situación de salir a hacer deporte durante la noche si es que se
desea mantener la constancia y el estado físico.
“En general, quienes salen a correr por la noche son hombres casados o solteros
que tras extensas jornadas laborales solamente tienen tiempo de hacer deporte a
la noche. Los varones se sienten más relajados después del trabajo.
Son personas que se levantan muy temprano por la mañana y no tienen un respiro
hasta que se acaba el día. Suelen ser personas muy deportistas y que siempre han
practicado ejercicio ya que salir a correr cuando termina un atenuante día
laboral requiere de un espíritu muy especial”, comenta el entrenador persona
español Joaquín Ramos Irigoitia.
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