Este inconveniente es temporal y se produce aproximadamente dos meses después
del alumbramiento. Luego de unos tres meses, el
cabello
vuelve a crecer sano y
fuerte. Algunas causas podrían encontrarse en el brusco descenso de estrógenos,
la abundante cantidad de sangre que se pierde, la disminución de la hidratación
y posibles infecciones.
Los métodos existentes en la actualidad para tratar la alopecia post parto no
son eficaces, pero nunca está de más consultar con un especialista para que
pueda detectar, aparte del hecho de haber dado a luz recientemente, algún otro
inconveniente que esté haciendo que se caiga el cabello.
Los especialistas indican que lo mejor es no preocuparse demasiado y si luego
de seis meses desde la fecha del parto el problema persiste, ahí sí consultar
con un profesional. “Es un período que la mujer debe atravesar con calma.
Ya suficiente tiene con el nuevo integrante de la familia y la demanda
constante que genera ansiedad y tensión como para ir sumando más problemas. La
pérdida de cabello tras el parto es natural, aunque si no se está acostumbrada a
perder pelo en cantidades, esta etapa pueda convertirse en un verdadero
calvario.
Aproximadamente son tres meses los que hay que resistir. Una vez el organismo
vaya recuperando sus niveles hormonales normales, se irá también resolviendo
este padecimiento. Hay que tener paciencia y hacer lo posible para no estar
nerviosa ya que el estrés empeora el cuadro”, comenta la ginecóloga y
obstetra española Contxi Padilla.
Cómo prevenir la caída del pelo en el embarazo
1.- Lavar el cabello con productos de buena calidad. A veces, una buena
inversión puede ayudar a que el trastorno no sea tan evidente y pueda
controlarse.
2.- Alimentarse adecuadamente. El consumo de verduras y frutas es muy
recomendado y en la época del post parto son alimentos esenciales que deben ser
ingeridos diariamente.
3.- Se recomienda no abusar de los peinados tirantes, ni del planchado ni de
permanentes. Lo más indicado es lavar el cabello y dejarlo secar de modo
natural. No es conveniente abusar de ningún producto como lacas o geles que
puedan debilitar aún más el pelo. Tampoco se aconseja el uso del secador, pinzas
o planchas.
4.- Los suplementos vitamínicos pueden ser una buena alternativa si la caída es
excesiva y preocupa a la reciente madre. Siempre hay que consultar a un
especialista. Hay que recordar que los niveles de hierro tras el parto pueden
verse disminuidos y una ayuda extra puede venir muy bien no solamente para
mejorar la condición capilar sino también para comenzar a sentirse de mejor
ánimo y con más fuerzas físicas.
El cabello de a poco se irá tornando más fuerte hasta lograr una apariencia
similar a la de antes del parto, sin embargo, nunca más volverá a ser el mismo.
El resultado final también dependerá de factores genéticos y de salud en
general.
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