Esta es la lista de los
tipos de pasajeros que uno debe tener en mente (y tratar de evitar) la próxima
vez que suba a un avión:
1. Los que hablan fuerte por celular
Usted está sentado en silencio, esperando que la puerta del avión se cierre
cuando la persona que está sentada a su lado, saca su teléfono celular y procede
a tener una larga conversación, en voz MUY alta acerca de diversos temas, que
pueden incluir los detalles íntimos sobre la cita de la noche anterior, una
enfermedad delicada, conversaciones confidenciales entre abogado y cliente e
incluso la ruptura de una pareja.
Una encuesta reciente
encontró que al 53 por ciento de los encuestados no le gustan los pasajeros que
hacen llamadas por teléfono usando el altavoz.
En realidad, nadie quiere
escuchar esto, ni en tierra, ni durante el vuelo, ni antes del despegue, ni
después del aterrizaje, así que tenga estas conversaciones desde su casa, por
favor.
2. Los padres desatentos
No hay nada
peor que estar en un avión con un niño que se porta mal y sus padres no hacen
nada. No les corresponde a las azafatas ni a los otros pasajeros la tarea de
disciplinar a los niños que se portan mal.
Así que, si usted es padre, por el
bien de sus compañeros de viaje, por favor mantenga a sus hijos entretenidos y
disciplinados en su próximo vuelo.
3. Los malolientes
Cuando viajamos, todos estamos encerrados en un tubo de metal cerrado,
respirando aire recirculado; por lo que este no es el momento adecuado para
empaparse con un perfume de aroma fuerte.
Tampoco es un buen momento para
decidir que usted no necesita darse una ducha antes de embarcar. Así que muestre
un poco de consideración por sus compañeros de viaje y asegúrese de higienizarse
bien antes de abordar su vuelo.
4. Los que hablan demasiado
A todos nos ha pasado: apenas terminamos de sentarnos y acomodarnos cuando
nuestro compañero de asiento comienza a charlar sobre TODOS los temas
imaginables.
5. Los que se cambian de asiento
Usted probablemente haya conocido a alguno de estos pasajeros – no importa qué
asiento tengan (por lo general el del medio), siempre quieren sentarse en el
asiento que le corresponde a usted.
O los padres/parejas que no consiguieron
asientos juntos y le preguntan si estaría dispuesto a cambiar de asiento, por lo
general por uno peor que el que usted tiene.
Si el cambio de asiento es por otro
asiento junto al pasillo, todo bien. Pero si no es así,
definitivamente es un no. Si alguien quiere asegurarse un asiento en particular,
que reserve con mayor anticipación o que gaste un poco más.
