Cada vez, los abuelos pasan más tiempo
con los nietos. Hay muchos abuelos que se encargan de los niños mientras los
padres trabajan.
Aparte de cariño, los abuelos aportan a
sus nietos experiencia, sabiduría y valores. Estos valores son por lo general,
aquellos que pasan de generación en generación, por lo tanto aportan historia
también.
La función respecto a la familia se debe
decidir y acordar en cada caso. La función educativa debe correr por cuenta de
los padres, y el papel de la tercera generación debería ser más amplio y más
activo. Es muy común, que al tener un nieto, los abuelos rejuvenezcan, se
sientan útiles y más felices.
Por otra parte a los niños también les
encanta estar con sus abuelos. En la mayoría de los casos es un momento de
relax: hay menos regañíos, menos límites, mas caprichos y mas regalos. Para
muchos nietos, la casa de sus abuelos es una aventura, allí encuentras tesoros,
cajas, postales y demás. Allí pueden desarrollar su imaginación.
Por supuesto que todo esto depende de la
personalidad del abuelo, y fundamentalmente de la relación con sus hijos.