Hay una sola
manera de quemar más calorías por cada paso que das sin aumentar la inclinación
y/o la velocidad. ¿Cuál es? Caminar en la arena.
Con el solo hecho de pararte en la arena, estarás quemando
grasas. Esto se debe a que los granos de la superficie requieren de un constante
cambio en la pisada. El sistema nervioso debe reclutar fibra extra de tus
músculos para poder afrontar las variaciones.
Como en cualquier superficie, existen niveles de ejercicio.
¿Cómo funciona?
1. Si eres nuevo en esta área, lo más recomendable es
comenzar en una arena húmeda que provee de mayor estabilidad.
2. Correr o saltar en elevación, puede ser peligroso y
causarte alguna lesión.
3. Siempre debes estar calzado. No varía la cantidad de
calorías que quemas y de esta manera siempre estarás protegido.
Rutina
1. 3 minutos de entrar en calor con una caminata suave.
2. Realizar estos ejercicios durante 30 segundos cada uno,
dos veces:
a. Correr rápido
b. Cambiar de dirección hacia la derecha
c. Cambiar de dirección hacia la izquierda
d. Correr hacia atrás
3. Corre por 3 minutos moderadamente
4. Has 15 repeticiones de cada uno de los siguientes saltos:
a. Salta tan alto como puedas llevando las rodillas al pecho
b. Empújate con un solo pie, y cae con el otro.
c. Has el salto anterior cambiando los lados.
d. Salta hacia adelante.
5. Corre por 3 minutos rápidamente
6. Has 15 repeticiones de los siguientes movimientos:
a. Abdominales
b. Espinales
c. Bicicleta
7. Corre por 6 minutos más
8. Repite el punto 2.
9. Sprint de velocidad de 50 metros.
10. Coloca las 4 extremidades en el piso, con la cola hacia
arriba y la espalda recta. Camina 50 metros manteniendo esa posición.
11. Camina 2 minutos
12. Elongación