Existe una muy especial virtud en saber proyectarse hacia el mañana a través de las elecciones de hoy. Evaluando la alternativa de ahorro e inversión que mejor se amolde a nuestros actuales logros y a nuestros sueños de futuro.
Cualquiera sea el proyecto que se tenga:
– Propio: asegurarse un ingreso para cuando deje de trabajar, realizar los viajes siempre postergados o invertir para proteger su vida y disfrutar de los ahorros e intereses.
– Familiar: asegurar la educación superior de sus hijos, ayudarlos cuando lo necesiten, garantizar el futuro y bienestar de toda la familia.
Lo importante es planificarlo para que sea una realidad en el futuro.
Pero ¿qué significa planificar?
Es definir hoy lo que quiere hacer dentro de varios años, o sea, pensar en no menos de 15. Por lo tanto, el tipo de ahorro o inversión que decida realizar hoy, deberá tener continuidad como mínimo por ese lapso.
Los aspectos más importantes de esta planificación son:
– El monto de capital necesario para mi proyecto.
– El tiempo que tenga para reunir el capital.
– La capacidad de ahorro.
Cuales son las alternativas:
– Imposiciones voluntarias, jubilación.
– Seguro de vida, seguro de retiro.
– Inversiones.
– Una combinación de dos alternativas.
De esto surge la necesidad de planificar ahorros a largo plazo durante nuestros años productivos.
Se debe tener en claro:
1 – Qué monto quiere, desea o necesita como jubilación
2 – Está en la AFJP más conveniente, de acuerdo al monto de sus aportes.
3 – ¿Aprovecha actualmente las ventajas de desgravación que brinda el Sistema Impositivo?
4 – Si tiene otras inversiones o ahorros. ¿A cuántos meses del ingreso actual equivalen?
5 – Sumando la Proyección de la AFJP más sus Ahorros o Inversiones, ¿necesita comprar además algún seguro de Vida o Retiro para alcanzar la jubilación deseada?
6 – Cómo optimizar los diferentes mecanismos de ahorro disponibles en base a criterios de:
•Liquidez
•Eficiencia impositiva operativa
•Rentabilidad
•Garantías
•Formas de recibir el beneficio