Coenzima Q-10: Un arma que se perfecciona

En la búsqueda de distintos medios válidos para combatir el flagelo del cáncer, la Ciencia Médica ha comenzado a mirar con interés hacia las áreas donde las Medicinas Alternativas parecen ofrecer un aporte sustancial, a través de productos de origen animal y vegetal, que prometen ser un complemento valiosísimo en la batalla sin tregua librada contra las enfermedades malignas.


Durante las  semanas previas a las fiestas de fin de año comemos<br /> compulsivamente Desde hace mucho tiempo se sabe que el stress es un factor que incide en<br /> el desarrollo de muchas enfermedades

La
también llamada
Vitamina Q-10, es una sustancia sintetizada naturalmente por el
organismo, para ser utilizada en un proceso conocido como “respiración aeróbica”
o “respiración celular”; por medio de ella la energía necesaria para el
crecimiento y mantenimiento de las células es producido en el interior de las
mismas, en compartimientos llamados mitocondrias.

Esta
coenzima es asimismo utilizada por el cuerpo como si se tratara de un
“anti-oxidante” endógeno. Un anti-oxidante es una sustancia que protege a las células de la acción
nociva de los llamados “radicales libres”, capaces de dañar a importantes
moléculas tales como el ADN y los lípidos.

El estrago que los radicales libres producen sobre el ADN celular, sería
uno de los factores responsables del desarrollo canceroso.

La
Coenzima Q-10 está presente en muchos tejidos , pero las concentraciones más
altas se encuentran en el corazón , el hígado , los riñones y el páncreas. A medida que una persona envejece , los niveles de Coenzima Q-10 se
vuelven cada vez menores.

Dada la importancia de esta sustancia para la óptima producción de
energía celular, se comenzó a investigar si su utilización sería de algún
provecho en enfermedades cardiovasculares y en el cáncer.

Se
comprobó fehacientemente su acción estimuladora sobre el sistema inmunitario,
y a través de estos efectos se utiliza como coadyuvante indirecto en el
tratamiento anticanceroso, asociando la misma a las distintas drogas quimioterápicas.

Hay evidencia científica que sugiere que compuestos análogos a la
Coenzima Q-10 son capaces de suprimir en forma directa el crecimiento y la
proliferación de distintos tipos de cáncer, actuando como antimetabolitos (
sustancias que interrumpen las reacciones químicas necesarias para que una célula
cancerosa crezca y sobreviva ).

Reportes
de investigadores suecos aseguran que este producto prolonga la sobrevida de
pacientes con cáncer pancreático, pulmonar, rectal y prostático; aún en
casos en los que no se utilizó ni quimioterapia ni radiaciones.

Referencias:

Folkers K, Wolaniuk A: Drugs
Under Experimental & Clinical Research. XI (8).539-545. 1985.

Overad K, Diament B, Holm L, et al.:
Coenzime
Q-10 in health and disease.
European Journal of Clinical Nutrition 53 (10)
764-770. 1999.

Pepping J:
Coenzime Q-10. American Journal of Health-System
Pharmacy. 56: 519-521. 1999.