Anímese a volver a sumergirse en “La dimensión desconocida”

Durante cinco temporadas, "The Twilight Zone"
mostró las mas fascinantes historias de gente común y corriente, -igual al
espectador medio de la serie-, que repentinamente eran trasladadas a lugares
donde abundaban las dobles personalidades, los personajes obsesivos, ocurrían
muertes, y todo tipo de situación imprevisible, siempre con un toque de magia y
misterio.

Su creador y productor Rod Serling, quien aparecía en el
comienzo para presentar el programa, estaba muy interesado desde hacía varios años
en masificar el genero de la ciencia ficción, para lo cual creía que era
fundamental que las historias tuvieran un alto grado de verosimilitud, es decir
que se vean muy reales, al punto de causar un miedo en el público que se
identificaría con los personajes, algo similar a lo que logró recrear Orson
Welles con “La guerra de los mundos”.

Uno de los motivos que mas influyo en los directivos para
estrenar a serie, fue la repercusión de un corto programa emitido el año
anterior, mas precisamente el 24 de noviembre de 1958, llamado "The Time
Element" (El Elemento Tiempo), escrito por el mismo Rod Serling y con la
dirección de Allen Reisner.

ue entonces que a partir de octubre del año siguiente,
comenzaron las emisiones de "The Twilight Zone", las cuales duraron
cinco temporadas, hasta Febrero de 1964. Todos los capítulos fueron rodados en
blanco y negro, y su duración fue de media hora en las tres primeras
temporadas, pasando a una hora en la cuarta y quinta.

Las tomas de filmación, trataron de destacarse desde un
principio por mantener un estilo propio. Para esto, se utilizaban muchos
“primeros planos” de rostros aterrados con sus gestos muy marcados. También
se busco dejar una marca en la “fotografía” de la serie, para los cual se
usaron escenarios sencillos, y fuertes efectos lumínicos.

La mayoría de los guiones fueron escritos por Rod Serling,
quien trabajó junto a Richard Matheson y Charles Beaumont.

Los argumentos que
estos autores creaban, estaban embebidos de su tiempo. Basta recordar que a
finales de los 50 y principios de los 60 se realizaron los primeros experimentos
espaciales en Norteamérica, -con lo que comenzaba la “carrera espacial”
entre ese país y la URSS-, para comprender la cantidad de capítulos que tenían
como historia central los temas espaciales, incluyendo a los extraterrestres y
el más allá.

Y como en cualquier obra artística, otro elemento
fundamental era la muerte, con todo su halo de misterio. En efecto, este tema no
era tomado desde el miedo que genera, sino por todo lo enigmático que lo rodea.
No eran pocos los episodios en los que aparecía el Sr. Muerte para buscar a un
personaje, lo que daba la pista de cómo seguiría la trama.

El otro tema
frecuente, era el de la doble vida de algún personaje. Al respecto, había dos
variantes: en la primera, se trataba de una persona con dos caras que eran casi
opuestas entre sí, tal vez para demostrar que todos tenemos un ángel y un
demonio por dentro; mientras tanto, en el segundo caso, existía otra persona (u
otro extraterrestre) igual al protagonista, lo que demostraba que nadie era único
en el mundo.

Se podría decir que la serie
no tenía un final, ya que, más allá del miedo a un desenlace poco feliz,
siempre se sabía que todo continuaba en otra dimensión, la dimensión
desconocida.

El éxito y la repercusión de "The Twilight
Zone", fue fácil de reconocer a través del tiempo, por las sucesivas
reediciones que se proujeron, tanto en cine como en TV.

En el primer caso, se
pueden citar las películas de Steven Spielberg, "En los límites de la
realidad", y de Toobe Hoper, "Nowhere man". En el caso de la TV, la secuela de la misma serie, "The New Twilight Zone",
entre 1985 y 1987 para la CBS, y en 1988 para la Syndication, las cuales
totalizaron, entre las dos, 95 capítulos.

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técnica