Por siempre Beatles

Genios, únicos, brillantes, dioses… solo algunas de las calificaciones que recibió el grupo musical que se transformo en una verdadera leyenda. Aquí, su historia de principio a fin

 

La leyenda de los Beatles
comienza en Liverpool, una ciudad del centro londinense habitada por familias de
clase media baja, que vivían gracias a su gran actividad industrial y portuaria.

Fue ese mismo lugar el que vio nacer a John Lennon y Richard Starkey (Ringo
Starr), en 1940, a Paul McCartney, en 1942, y a George Harrison, en 1943. Todos
ellos fueron los clásicos “kids” de barrio, criados en el seno de familias que
vivían con lo justo.

La infancia más dura, fue
la que debió soportar John Lennon, puesto que su padre abandonó a la familia
poco tiempo después de que el cantante naciese, por lo que su madre debió
hacerse cargo de la familia. Pero pocos años mas tarde, moriría atropellada por
un policía borracho.

Del lado opuesto, se
encontraba Paul McCartney, quien nació en una familia bastante acomodada para el
promedio estándar, por lo que incluso pudo llegar a estudiar música con
profesores particulares.

En un principio, John, Paul, y George, junto con otros músicos, se unieron para
tocar en fiestas estudiantiles, salones parroquiales, y ceremonias familiares,
bajo el nombre de The Quarrymen.

Se podría decir que el
verdadero comienzo de The Beatles, fue cuando ellos tres (portando solo una
guitarra cada uno), más Stuart Stuclife en el bajo y Pete Best en la batería,
iniciaron un viaje para tocar en Hamburgo, Alemania.

Fue allí donde, luego de
interminables noches tocando a todo volumen en bares y pubs llenos de borrachos
y prostitutas, el grupo empezó a delinear un estilo, y a sentir que podrían
llegar a vivir de la música.

En medio de ese viaje, y por causas que aún hoy no están del todo claras, el
grupo se separó de Stuclife, quien permaneció en Hamburgo. Al regresar a
Liverpool, comenzaron a tocar regularmente en “The cavern” un pub-disco en el
que actuaban la mayoría de los grupos underground.+

Fue ese salón, hoy en día
demolido, el lugar donde comenzó la leyenda, ya que, además de hacerse muy
populares en su propio territorio, fueron vistos por primera vez por Brian
Epstein, un manager de artistas que buscaba nuevos grupos para
representar (aunque esa noche solo se dirigía a una tienda de discos).

Cuando Epstein los oyó,
supo desde un primer momento que el grupo sería un éxito, por lo que les
consiguió una audición con George Martin, un productor de la EMI que necesitaba
nuevos talentos.

Luego de oírlos tocar, Martin no quedo del todo conforme con
Pete Best, por lo que aconsejó desprenderse del baterista, algo en lo que el
grupo estuvo de acuerdo, por lo que también contrataron a Ringo Starr.

Así, en septiembre de
1962, fue grabada “Love me do” una canción que tuvo un gran éxito y llegó
al Top20 de Inglaterra, lo cual les abrió el camino para poder iniciar una
importante gira nacional. Un año mas tarde, “Please, please me” llegó a
ser número uno en Inglaterra, y “The Beatles” comenzaron a experimentar un
crecimiento vertiginoso.

A mediados de ese año salió a la venta su primer LP, “Please, please me
que batió record de venta, con lo que su fama creció aun mas.

Luego de la gira
por Estados Unidos, su fama traspasó las fronteras de Gran Bretaña, aunque fue
en su país donde lograron su máximo reconocimiento, cuando en una decisión muy
polémica, la reina de Inglaterra los nombro “caballeros” del Imperio. Por esos
tiempos, también fueron elegidos para interpretar All you need is love en
la primera transmisión del primer canal internacional de televisión.

Agotados por sus giras, presentaciones, conferencias, intervenciones públicas,
seguimiento de la prensa, homenajes, etc., etc., Los Beatles dejaron de efectuar
conciertos en vivo a partir de 1966, y solos se dedicaron a grabar discos.

Pero dos años más tarde, las relaciones entre Lennon y McCartney comenzarían a
entrar en cortocircuito. La aparición de Yoko Ono, la nueva esposa de John
Lennon, dentro de la intimidad del grupo, sumado a las diferencias económicas
que planteaba McCartney, y el desgaste mismo de una relación de quince años,
haría que la continuidad del grupo se tornase insostenible. Así, en 1969, el
grupo cumplió su última presentación, en la terraza del edificio de Apple, su
compañía grabadora.

Previamente, habían
grabado el documental “Let it be”, y “Abbey road” el que sería su
último disco. Para cuando el LP y la película vieron la luz, en 1970, el grupo
ya no existía.

Los cuatro integrantes jamás volvieron a reunirse, y jamás lo volverán a hacer,
puesto que John Lennon fue asesinado por un fanático demente en 1980, en Nueva
York, y George Harrison murió de cáncer el año pasado, en su Inglaterra natal.

La tecnología, sin
embargo, pudo juntarlos cinco años atrás, cuando, utilizando grabaciones
inéditas de canciones cantadas a capella por John Lennon, los otros tres
integrantes terminaron de componer Free as a Bird y Real Love.

Pero, sin embargo, ni los
Beatles mismos fueron capaces de recrear su enorme magia, un desafío que, hoy en
día, parece imposible para cualquier mortal.