Cómo saber hacia dónde se dirige un mercado

A la hora de invertir en acciones, no es bueno dejar que el árbol tape el bosque...

El mercado
global influye en el desempeño de los mercados más pequeños y las acciones
individuales, por lo que es muy importante estudiar primero el cuadro global
antes de ocuparse en forma aislada de una acción en particular.

Para esto, debe
estudiar:

1-
El marco temporal


Se trata de
decidir en que ciclo comenzará a negociar. En este sentido, debe saber que
siempre existen cuatro opciones:

1. Las
tendencias a largo plazo (o primarias), que se miden en años

2. Las
tendencias intermedias (o secundarias), que van desde tres semanas hasta 6 meses

3. Las
tendencias o ciclos de corto plazo, que duran menos de tres semanas

4. Las
tendencias del día.

2-
Indicadores de tendencias


Trate de
negociar siguiendo la tendencia que prevalece en el mercado general.

En este sentido,
utilice un indicador de tendencia para determinar la dirección en que el
mercado se está moviendo, utilizando índices como el Dow & Jones, el
Standard & Poor 500 y el NASDAQ.

Sepa que el Dow
comprende las primeras treinta acciones industriales, mientras que el S&P
500 es más representativa del mercado entero. El NASDAQ, por su parte, tiene
relación con los precios de las acciones tecnológicas.

Si está
actuando en un mercado fuera de los Estados Unidos, utilice también un índice
local.

3-
Dirección de la tendencia


Como le señalamos,
sería importante que negocie sólo en la dirección que marca la tendencia, y
especialmente tome acción sólo si tiene señales seguras de que la tendencia
es hacia el alza.

Señales
de entrada y salida


Una vez definida
la tendencia, deberá concentrarse en las señales de entrada y salida.

Para
determinarlas, pero muchos analistas no utilizan ninguno y toman como puntos de
entrada las rupturas de los niveles de resistencia.

Frenando
las pérdidas


La orden llamada
“Stop-Loss” es una orden que sólo se coloca en el mercado si el
precio cae a un nivel predeterminado. Si se utilizan correctamente, ayudan a
limitar las pérdidas en los negocios individuales.

Esta orden debe
colocarse tan pronto como cada operación se haya confirmado. Como guía, elija
como nivel predeterminado uno un punto por debajo del precio más bajo alcanzado
en el periodo de tiempo estipulado.

También es
necesario determinar el nivel de pérdidas aceptables, entendido como un
porcentaje del capital invertido. Nunca haga una operación si el “Stop-Loss”
excederá ese límite. 

Para un
inversionista de largo plazo, que mantiene un razonable riesgo de diversificación,
puede ponerse un límite de 6 % de pérdidas, mientras que uno de corto plazo
debería tener un límite de 2 %.

Al margen de
ajustar los niveles de “Stop-Losses” hacia arriba o hacia abajo,
dependiendo de las variaciones del mercado, un inversionista alerta debe también
ajustarlos cuando hay señales muy fuertes como picos y 
bajas pronunciadas.