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Tengo una duda que me inquieta, y mucho.
Siempre me he considerado heterosexual, pero mis fantasías sexuales, incluso
estando con mi pareja, casi siempre son con hombres atractivos ( a veces solo
los visualizo, y otras me veo haciéndolo con ellos). Me encanta ver fotos de
hombres desnudos y de gays en plena acción, son imágenes que me ponen a 100
por hora.
Nunca le había dado importancia, ya que mi pareja me atrae y me excita, y mis
relaciones sexuales con ella son muy satisfactorias (aunque a veces, si noto que
la libido se me baja, fantaseo con hombres y la recupero ). Como decía, nunca
le había dado importancia, de hecho, en la vida real, siempre he buscado
chicas, nunca he perseguido a los chicos (aunque alguna vez, si me cruzo con
alguno muy guapo en el gimnasio, pues me gusta fantasear un poco ).
La cosa es que tengo un amigo que es gay. Le conté cuales eran mis fantasías
mas habituales (también tengo con mujeres, pero son las menos ) y me dijo, que
yo o bien era gay o era bisexual, pero que yo todavía no me había dado cuenta.
La verdad es que me considero heterosexual, pero tengo miedo de que lo que me ha
dicho sea cierto.
Por favor, ayúdeme y dígame si tener esas fantasías es normal. No quisiera
darme cuenta dentro de unos años de que he reprimido mis tendencias sexuales
(si es que las tengo reprimidas ), y destrozar una familia (la mía).
Respuesta:
Las
fantasías sexuales son fantasías.
Eso significa que pueden ser muy erotizantes pero que no necesariamente se
quieren llevar a la práctica. Incluso, en la realidad pueden producir el efecto
contrario a la excitación (miedo, vergüenza, asco, etc).
Por ejemplo, una de las fantasías habituales de las mujeres es la de la violación,
pero de hecho, si ello sucediera, sería una situación traumática.
Esto
quiere decir que el erotismo es muy amplio y absolutamente personal.
Si bien aun estás aprendiendo a conocerte, tienes claros tus proyectos
afectivos (formar una familia). Las fantasías homosexuales pueden enriquecer tu
vida sexual mientras no entres en conflicto con ellas. En ese caso, necesitarías
emprender un tratamiento sexológico que te ayude a comprenderte y a
recuperar tu equilibrio.
Por
otro lado, algunas personas homosexuales pueden no tener resuelta su propia
homosexualidad y ponen en los otros sus propias dudas o necesitan sentir que los
otros son iguales a ellos para no sentirse diferentes. No lo hacen
intencionalmente, pero cuídate de la influencia de tu amigo en ese sentido.
