La palabra Chakra
viene del sánscrito y quiere decir disco o rueda. Se usa para representar cada
uno de los siete puntos de energía del cuerpo. Cada uno de estos puntos tiene relación con emociones, sensaciones, funciones del cuerpo, formas de
percepción, etc.
Primer Chakra
Supervivencia,
conciencia física, Tierra.
Ubicado en la base
de la espina dorsal, este chakra forma parte de nuestro basamento. Representa el
elemento Tierra, de forma que está relacionado con nuestros instintos de
supervivencia y con nuestra necesidad de conexión con lo terrenal: nuestro
cuerpo y lo que nos rodea. Este Chakra está relacionado con la salud, la
prosperidad material, la seguridad y la presencia dinámica.
Segundo Chakra
Agua, identidad
emocional, satisfacción personal.
Este Chakra está
ubicado sobre la columna, a la altura del abdomen. Relacionado en forma directa
con nuestra sexualidad y emociones. Nos conecta con los demás a través de
sentimientos, deseos, sensaciones y movimientos. Este Chakra está relacionado
con la gracia en nuestros movimientos, la profundidad de las emociones, la sexualidad y la capacidad de cambio.
Tercer Chakra
Fuego, ego,
sentido de identidad personal.
Este Chakra,
conocido como el Chakra del Poder, está ubicado en el plexo solar. Controla
nuestro poder personal, voluntad y autonomía. El funcionamiento de nuestro
metabolismo está concentrado en este punto. Si se es una persona saludable,
este Chakra está íntimamente relacionado con la energía, la efectividad, la
espontaneidad y el poder no dominador.
Cuarto Chakra
Aire, identidad
social, aceptación propia.
Este Chakra es
llamado el Chakra del corazón y es el punto central en un sistema de siete
círculos. Íntimamente relacionado con el amor, es quien integra los puntos
opuestos existentes en cualquier persona: mente y cuerpo, hombre y mujer,
persona y sombra, ego y unidad. Un cuarto Chakra saludable nos permitirá amar
profundamente, sentir compasión, vivir con una gran paz interior.
Quinto Chakra
Sonidos,
creatividad, expresividad.
Este Chakra está
ubicado a la altura de la garganta. Está relacionado con nuestra capacidad de
comunicarnos y nuestra creatividad. Aquí es donde se experimenta el mundo a
través de símbolos, de vibraciones que son interpretadas como sonidos y luego
como lenguaje.
Sexto Chakra
Luz, identidad
arquetípica, reflexión interior.
Este Chakra es
conocido como el Tercer Ojo. Está relacionado con nuestra capacidad de
percibir, tanto física como intuitivamente. Es quien nos abre al mundo, por
donde nuestras facultades físicas de percibir entran en contacto con el
exterior y donde se interpreta aquello que llega. Aquí la comprensión y el
entendimiento se encuentran en forma arquetípica. Si este Chakra es saludable
nos brinda la capacidad de ver con claridad.
Séptimo Chakra
Pensamiento,
identidad universal, conocimiento interior
Este Chakra
conecta nuestra conciencia con aquello que sólo intuimos, que está en el límite
de nuestra percepción. Nuestra puerta a todo el universo que se encuentra más
allá de nuestro universo, donde no hay tiempo, donde no hay espacio, donde sólo
existe el conocimiento. Este Chakra debe ser descubierto para que nos brinde
sabiduría, comprensión y conexión espiritual.
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