Pero
yo creo mas que todo es la falta de comunicación con los hijos y con la pareja
porque día a día se pierden mas hogares. Y en esa pérdida esta el problema más grave de los hijos, no
hay los pilares que sostienen el hogar
el hogar esta basada en dos pilares cualquiera que falle se puede destruir.
Algo
que podemos hacer los padres para tratar de que nuestros hijos nos tengan
confianza y podamos hablar de todas sus dudas sus miedos podrimos tratar con
esto:
Los
padres deben estar siempre “al pie del cañón” con los hijos, prepararse para
responder a sus inquietudes, o para prodigarles algún consejo. Ser padre
comienza con la concepción y nacimiento del niño, pero es una tarea que nunca
termina.
¿Hay que prepararse para ser
papás?
Cuanto mayor sea la preparación de los padres, el éxito en la educación de los
hijos será mayor.
“La falta de formación no se suple con nada, ni con un gran corazón, ni con
talento, ni con planes de conquista.
Y mucho menos pensar en poder cumplir la misión sin antes haberse esforzado
valientemente por adquirir esa preparación” dice un experto formador y
gran pedagogo.
¿Cómo prepararse?
Pues echando mano de todo lo que se tenga al alcance
conferencias,
revistas, periódicos, libros, programas especializados y un sinfín de opciones
que las escuelas y nuestra misma sociedad nos ofrece
Opciones
que las escuelas y nuestra misma sociedad nos ofrece.
No existe quién pueda afirmar con certeza cuando un hijo ya está maduro y listo
para enfrentarse solo al mundo.
Aún cuando ya sean profesionistas o estén casados, los hijos algunas veces
necesitan del consejo de los padres.
De ahí la gran importancia de prepararnos y actualizarnos constantemente.
La misión de ser padre necesita de una actitud, como decían nuestros abuelos,
de estar “al pie del cañón” siempre e incondicionalmente, atentos y
dispuestos a no dejar pasar ninguna oportunidad que nos ayude en esta difícil
labor.
¿Qué tal va el ejemplo?
Primero hay que “hacer” para luego “predicar”.
El adolescente es idealista por naturaleza, puede confundirse y hasta rebelarse
cuando alguien que él respeta lo defrauda con un comportamiento u opinión
incongruente.
Esto no debe ser motivo de preocupación, los padres no somos perfectos, el adolescente lo sabe y además
tiene una gran capacidad de comprensión, siempre y cuando los adultos sean
capaces de aceptar sus errores, disculparse y tratar de llegar junto con él a
un acuerdo, con esto incluso se gana respeto.
Conocer cómo piensan aunque nos dé mucho
miedo sus pensamientos tanto en sexo como en temas difíciles sea cualquiera.
Darse tiempo para conocer lo que piensan los hijos, es un punto clave y
usualmente olvidado.
El criterio y la moral de un niño o joven están en pleno desarrollo o formación
y así como los padres se interesan en dar información sobre ciertos principios
y valores, también conviene asegurar su asimilación.
Es necesario intuir, sondear por medio del diálogo su manera de pensar acerca
de aspectos vitales, humanos, morales, familiares, que se ha tratado de trasmitirles.
El medio ambiente (amistades, medios de comunicación, corrientes ideológicas),
puede deteriorar e incluso cambiar los valores que los padres han trasmitido a
sus hijos.
Si se busca conocerlos, orientarlos, es importante escucharlos expresar libremente
sus dudas y opiniones. Darles la seguridad de que existe interés y respeto, con
palabras pero sobre todo en la práctica.
Una forma de comenzar puede ser conocer qué opinan de la noticia del día o de
lo que le pasó a un amigo, del programa de televisión o la película de moda, o
bien preguntarles sencillamente lo que piensan o lo que harían ante una
situación determinada.
Si su respuesta muestra que su criterio es fiel al valor transmitido y se le
reconoce, se logrará reafirmarle.
Si no lo es, será momento para tratar de llevarlo (sin imposiciones) a una
reflexión basada en una buena información que lo encamine a descubrir la
verdad.
No es sólo venderles la idea sino, que sea su propia idea, así la seguirán con
mayor fidelidad. Y los más importante el amor si el amor, abrazarlos a mí me
gusto mucho una frase de que me tocó escuchar en una conferencia del Dr. Lozano
al referirse al amor de los hijos y es:
ABRACEN A SUS HIJOS, BÉSENLOS. EN UNA PALABRA, ATOSIGUELOS.
Y CON UNA ALEGRIA EN SU CARA DIJO: SI MIS PADRES NO ME HUBIESEN ATOSIGADO NO
ESTARIA PARADO AQUÍ FRENTE A USTEDES.
EL ATOSIGAR A UN HIJO ES DARLE ARMAS PARA
NO TEMER A NADA: “ CON AMOR TODO SE PUEDE.”
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