Con
los arcanos mayores puedes interpretar todo aquello que quieras saber, pero es
necesario que grabes bien en tu mente el significado de cada uno de ellos.
0.
El Loco »
El Loco se ha embarcado en una nueva aventura. Ha cortado sus relaciones
anteriores con la familia y los amigos. Su rostro expresa inocencia con un
rictus de tristeza.
I.
El Mago » Este signo dual revela que todas las cosas se
derivan de lo alto para alcanzar su creación en la Tierra. El mago posee la
facultad de utilizar los distintos objetos que tiene en la mesa para triunfar en
el pensamiento, la palabra y la acción.
II.
La Sacerdotisa » Representa la mujer perfecta y es la
esencia de toda feminidad, aunque no precisamente de lo femenino en el sentido
romántico. Es protectora de la sabiduría y dispensadora del conocimiento.
III.
La Emperatriz » La Emperatriz sugiere el símbolo de
productividad femenina y acción. Es una mujer de conocimientos e inteligencia.
IV.
El Emperador »
El Emperador aparece sentado contra un fondo de espacio abierto, que simboliza
la perspectiva de sus dominios. Sus piernas cruzadas indican relajación; aún
en su postura de responsabilidad, se encuentra cómodamente.
V.
El Sumo Sacerdote»
Personifica la esencia de ser un individuo capaz de decidir el vivir o no dentro
de las normas de la ley. Este es el factor de dualidad que permite al hombre
escoger entre la indulgencia o la severidad y la obediencia o desatención,
libremente de toda obligación.
VI.
Los Enamorados»
Los enamorados representan cuanto es fundamental en las acciones recíprocas del
amor y el afecto entre seres humanos.
VII.
El Carro» El carro triunfal es
arrastrado por dos fogosos caballos que representan la mezcla de desorden y
angustia y la unión de lo positivo y lo negativo. El carro representa las
corrientes materiales que conducen al hombre hacia su destino.
VIII.
La Justicia » La Justicia es capaz de una correcta administración
de los modos y costumbres, de acuerdo con los mejores intereses de las personas
afectadas. Representa los pilares de la fuerza moral y de la integridad.
IX.
El Ermitaño » El Ermitaño es el guardián del tiempo. Es
el sabio que ofrece sabiduría y la verdad conseguidas en la eternidad del
conocimiento del pasado.
X.
La Rueda de la Fortuna » La Rueda es un círculo sin
principio ni fin. Por consiguiente, el símbolo de la eternidad perpetua
mantiene a las dos figuras en el movimiento constante de un universo
interrumpidamente variable y de la corriente de la vida humana.
De
“La Fuerza” hasta “El mundo”.
