La mayor parte de los perros y gatos son potadores del parasito Pasteurella multocida que se alberga en la cavidad bucal y se transmite, principalmente, por mordedura.
En el hombre las principales manifestaciones clínicas consisten en heridas infectadas causadas por la mordedura.
El microorganismo se transmite a la herida y pocas horas mas tarde hay tumefacción, enrojecimiento y dolor intenso.
El proceso inflamatorio puede penetrar a capas profundas y ocasionar complicaciones.
Las medidas preventivas tienen que ver con el evitar las mordeduras, especialmente, las de los perros callejeros.
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