Para comenzar, colocamos agua en una
vasija de vidrio o una fuente, y agregas un chorrito de alcohol. Echa también,
agua bendita, un puño de sal y otro de canela en polvo.
Ahora, debemos introducir en el agua, el
billete más grande que tenemos. Abrimos las manos, con las palmas hacia abajo y
recitamos:
“Dios padre, todopoderoso, en tu santo
nombre y en el de tu hijo, amado cristo jesus, me declaro abundante, me declaro
abundante, me declaro abundante en unidad contigo. Te bendigo, y me bendices.
Gracias por siempre señor dios.”
Terminas, y te quedas concentrado,
imaginándote a ti con abundancia. Cuando terminas, dejas reposar el agua por 7
días en algún lugar donde solo tú lo veas y con luz.
Luego, retiras el billete y lo pones a
secar. El liquido lo echas en una maceta sin espinas.
Por último, el billete lo colocas en tu
billetera, sin gastarlo.