La influencia de los Cinco Elementos en el comportamiento humano

Nadie duda que es posible anticiparse y pronosticar ciertos movimientos de la naturaleza, como por ejemplo el frondoso crecimiento de los árboles en primavera. Lo que los antiguos eruditos chinos se preguntaron, entonces, era si no era también posible anticiparse al comportamiento de los seres humanos, en la medida en que éstos también son parte de la naturaleza.

Los antiguos eruditos
chinos del YIN-YANG, pensaban que el universo estaba dividido en tres partes. La
primera era el cielo, la segunda la tierra, y la tercera, todo lo referente a
las especies vivas. Como era el ser humano quien estaba a cargo de todas las
especies viva, a esta tercera parte la denominaron Human.

 Podemos encontrar el
metal, el agua, la madera, el fuego y la tierra por todas partes de la tierra.
Los eruditos chinos nombraron a estos elementos los Cinco Elementos. Los seres
humanos viven entre el cielo y la tierra, al igual que los Cinco Elementos. Por
lo tanto, los seres humanos deben tener una relación directa con los Cinco
Elementos, siendo incluso parte de ellos. Y así como existen relaciones de
afinidad y enemistad comprobables entre los cinco elementos (el agua y el fuego
no pueden convivir), también deben existir relaciones similares entre los seres
humanos. Lo mismo sucede con ciertos comportamientos previsibles de estos Cinco
Elementos, que pueden sin dudas corresponderse con los de los seres humanos…

 Por ejemplo, los árboles
tienen su propio ciclo de crecimiento en medio del Cielo y la Tierra. Los seres
humanos deben tener ciclos vitales similares a los de árboles. Los cambios
estacionales afectan el crecimiento de árboles. Los árboles crecen más
rápidamente en la primavera y más lento en el otoño. Los cambios ambientales
también afectan la vida de árboles. Sin un sol adecuado, los mismos crecen
demasiado lento. Por el contrario, con demasiado calor, los árboles serán
disecados. Sin agua, los árboles no pueden crecer. Con demasiada agua, los
árboles se ahogan y pueden morir. Con tierra escasa, el árbol no crecerá alto…

 De la misma forma, el
ciclo vital humano también es afectado por los mismos cambios estacionales y
ambientales. Los cambios estacionales provienen del sol y de la luna, que son el
reloj de los calendarios. El Calendario Chino se diseña teniendo en cuenta el
sol y la luna, más el ciclo de Nacimiento de Rama (concepto tomado de los
árboles). Los eruditos chinos del YIN-YANG aplicaron durante miles de años estos
Cinco Elementos en el Calendario Chino. De esta manera, los seres humanos pueden
saber la injerencia de estos Cinco Elementos utilizando su fecha de nacimiento y
edad, y conocer así la suerte que les depara a sus vidas.

 Cuando las estaciones y
el ambiente cambian, los Cinco Elementos tienen ciertas injerencias. Los seres
humanos responden de una manera similar. Los eruditos de YIN-YANG pudieron hacer
predicciones sobre el ciclo vital humano, desde el nacimiento hasta la muerte,
utilizando este fenómeno natural.