Si el número de cremas nocturnas es, en cierta forma, un tipo de indicador,
entonces el momento adecuado para comenzar a mimar tu piel es, sin dudas, cuando
vayas a acostarte.
Aunque no hay estudios científicos publicados que comparen los productos
nocturnos y diurnos, puede haber algunas ventajas en tratar la piel durante las
horas de sueño.
Los químicos en cosmética saben, por ejemplo, que muchos ingredientes anti-edad
se mantienen activos por más tiempo cuando no son expuestos a la luz del sol.
Los
retinoides,
que aceleran la actividad celular, pueden desactivarse químicamente con la
exposición al sol y hacerse inefectivos.
Otros productos anti-edad, como vitaminas tópicas, incluyendo la C y la E, no se
llevan bien con la luz solar o el aire. Si bien son productos que se pueden usar
de día o de noche, es posible que obtengas una mayor explosión antioxidante si
los aplicas antes de ir a la cama.
Por otra parte, el período de sueño te da la posibilidad de hidratar tu piel
durante ocho horas –hablando en general- con fórmulas que no se complementan con
la base del maquillaje o que podrían darte un brillo que preferirías ocultar a
la luz del día.
Estos superhidratantes no sólo atraen la humedad hacia la piel sino que también
evitan que se evapore de su superficie. Existe alguna evidencia, asimismo, que
la piel es más receptiva a los ingredientes activos cuando estás durmiendo,
porque “no tiene que vérselas con el sol, la polución, o el maquillaje; el
producto simplemente consigue hacer su trabajo.
Y aún hay mas: actualmente, los investigadores están coincidiendo en que la piel
trabaja más fuerte para rejuvenecerse durante el turno de la noche. La
regeneración de las células de la piel es ligeramente más veloz durante la noche
que durante el día.
Por eso, las horas de sueño son un momento preciado por tu cuerpo para
repararse, y la piel está incluida en este proceso.
Aquí van algunos consejos para que tu sueño te ayude a regenerar en mayor forma
las células del cuerpo:
·
Duerme recostado en forma plana sobre tu espalda: hundir tu cara en la almohada
crea líneas y pliegues en la piel que pueden hacerse permanentes si se repiten
todas las noches. Por otra parte, dormir de espaldas (mirando al techo) ayuda a
contrarrestar los efectos de la gravedad acumulados durante el día. En un
estudio reciente practicado sobre 38 hombres y mujeres, investigadores japoneses
encontraron que los rostros mostraban mayores arrugas durante las tardes que por
las mañanas. En consecuencia, concluyeron que la cara caía con la gravedad a
medida que el día transcurría. Por las noches, sin embargo, tienes la
posibilidad de revertir este efecto.
·
Mantente hidratada: conservar la humedad de la piel desde adentro es un método
de hidratación simple, barato y efectivo. Bebe de seis a ocho vasos de agua pura
a lo largo de todo el día e incluye ácidos grasos omega-3 (se encuentran en los
pescados y en las nueces) en tu dieta. Para prevenir la pérdida de humectación
en la piel durante el sueño, enciende un humidificador. Muchas personas, que
adquieren humidificadores a raíz de problemas de sequedad de garganta, terminan
dándose cuenta que su piel mejora notablemente. En cualquier caso, asegúrate de
limpiar con frecuencia el humidificador, sobre todo si eres propenso a las
alergias.
·
Usa un humectante después del baño: asegura la humedad que la capa superior de
la piel ha absorbido con una loción o crema corporal hidratante. Dado que estás
por irte a la cama –antes de ponerte esa blusa de seda o ese suéter de
cachemira-, prueba con una crema corporal que sea más rica que la que te sientes
cómoda usando durante el día. Antes de ir a la cama es el momento perfecto para
mimar tus pies, sobre todo para humectar tus talones con una crema de cuidado
intensivo para esa zona. No olvides humectar tus uñas y cutículas. Para un toque
final de humectación, masajea tus manos con una crema regeneradora.
Hanan
- Consultora de belleza natural, es autora de "Alimentos
para la belleza", que te enseña cuáles son los
Potenciadores de
belleza GRATUITOS que están en y cerca de tu cocina. ¿Un
sustituto del Botox a $0.50? Sí, y más...