Secretos de la lipoaspiración
Cada vez más personas recurren a la
liposucción como método para quitar la adiposidad localizada.
En un momento de gran interés por modificar
por medio de cirugías todas aquellas partes que no gustan del cuerpo, se recurre
a esta técnica que no es definitiva pero puede ayudar.
Actualmente y desde hace varios años, la cirugía plástica se ha puesto muy de
moda mundialmente, en unos países más que en otros. En el caso del viejo
continente, Europa, tuvo su gran furor hace unos años atrás; pero ahora la
mayoría de las personas aceptan la vejez y los cambios físicos y estéticos que
esta trae, prefiriendo gastar el dinero en otras cosas.
En Estados Unidos y Europa todavía permanece el furor, aunque en menor grado que en años
anteriores. La mayoría de los postulantes a cirugías plásticas, son estrellas
famosas que acuden a un bisturí para conseguir el papel protagónico anhelado o
personas comunes que por accidentes o deformación por enfermedades se ven en la
necesidad de acudir a la ayuda de un cirujano plástico.
En América Latina, en estos momentos la técnica se encuentra en auge. Las
personas se operan por diferentes motivos: por que se ven viejos frente al
sincero espejo, deformes, con labios pequeños, con nariz no acorde a sus gustos,
con senos más chicos o más grandes o simplemente para sacarse esos rollos y
acumulaciones de grasas que se ven de más.
La liposucción o lipoaspiración, es un método al que recurren muchas personas
para deshacerse de esas adiposidades que les molestan. En pocas palabras,
consiste en la extracción manual o mecánica de las acumulaciones de grasa que se
encuentran en cualquier parte del cuerpo.
Mecánicamente se realiza con un equipo
denominado lipoaspirador, que se utiliza para las grandes cantidades de grasas
como abdomen, glúteos, muslos.
Este tipo de procedimiento casi siempre se complementa con una cirugía que
permite, una vez sacada la grasa, poder extirpar toda esa piel que quedó de más
en las partes succionadas.
En pacientes obesos, se les indica
previamente un tratamiento médico y alimentario y recién después se lleva a cabo
la operación, cuando el especialista considera que el paciente está apto.
En el caso del mecanismo manual, se realiza en lugares con pequeñas
acumulaciones de grasa como: la cara, los brazos o en personas no obesas que
simplemente quieren prescindir de pequeños rollitos que les molestan.
Pero muchas personas mal informadas piensan que con la liposucción su problema
queda definitivamente erradicado.
Por eso, es necesario aclararles que con este método se extraen células adiposas
(adipocitos), y el resto de adipositos que quedan en el organismo pueden volver
a crecer y ocupar el lugar vacío que dejaron los extraídos.
Por lo tanto, para lograr un trabajo eficaz, después de realizada una
liposucción en cualquier parte del cuerpo, es sumamente importante recomendarle
al paciente que realice una buena alimentación baja en calorías y en grasa,
junto con la práctica frecuente de ejercicios físicos.