Un problema habitual en muchos corredores, es el dolor crónico de rodillas. Si bien esto puede tener muchas causas, que van desde malas posturas hasta problemas óseos, lo más común es que tanga relación con la superficie en la que se corre. En esta nota, algunas sugerencias para solucionar este problema

Incluso los caballos
saben muy bien que no deben correr en el pavimento, pero nosotros, los humanos,
parecemos no tomar en cuenta este importante recaudo, y de hecho basta observar
cualquier ciudad del mundo, para ver corredores tomando calles, avenidas, y otro
tipo de áreas pavimentadas, sin saber el daño que le están haciendo a sus
rodillas.

 En efecto, en muchos
casos, las heridas ocurren luego de un tiempo constante de exponerlas al trote
sobre el pavimento. Este movimiento repetitivo de trote sobre una superficie
dura, va desgastando las articulaciones de la rodilla, y eventualmente puede
surgir el dolor.

 Tenga en cuenta que las
heridas graves generalmente surgen de forma repentinamente. Cuándo un jugador de
fútbol se retuerce de dolor en el campo de juego, es por que sus ligamentos se
han golpeado con algo rígido, por lo que el dolor es intolerable. Esto es
diferente al dolor gradual y constante que se puede experimentar en las rodillas
de un corredor.

 Si bien las heridas
graves, como las fracturas, las quebraduras de cartílagos y ligamentos,
necesitan de una rápida atención y tratamiento médico, a veces el simple pero
molesto dolor de rodillas se puede aliviar, o puede ser disminuido, mediante
buenos tratamientos caseros.


 Superficies que pueden causar dolor en la rodilla

 Sin dudas que cualquier
superficie suave, como por ejemplo la arena, no tienen mayor incidencia en las
articulaciones de la rodilla, ya que las mismas actúan como una especie de
almohada que absorbe el golpe del pie, pero muy diferente es el caso del duro
pavimento de las calles y las aceras, donde el golpe efectuado “rebota” en
nuestros huesos.

 Asimismo, si se vive en
un área montañosa, se puede advertir que trotar cuesta abajo es más doloroso que
ir ascendiendo. Sucede que la rodilla está más tensa cuando se trota cuesta
abajo. Una solución sería elegir áreas más planas, antes que las zonas con
altibajos.


 Medidas a tomar frente a los primeros síntomas de dolor


 

Obviamente, si es un
dolor repentino, agudo e intolerable, debe dirigirse a su médico kinesiólogo o
concurrir a un centro de emergencias.

 Sin embargo, si el dolor
es suave pero constante y molesto, y la rodilla no parece encontrar su posición,
se deberá parar de correr durante unas pocas semanas, para que la rodilla pueda
recuperarse. 

Claro que decirle a un
corredor que pare de correr es como decirle un perro de pare de ladrar. Sin
embargo, un buen atleta sabe escuchar a su cuerpo, y se dará cuenta de que, a
veces, apenas un poquito de descanso es todo lo que se necesita.

 Los doctores suelen
también recomendar cuatro medidas para acelerar y ayudar a la recuperación:
Descanso, Hielo, Compresión, y Elevación.



  1. Descanso

Descansar la rodilla
significa no correr.
 



  1. Hielo

El hielo se debe poner en
el área afectada. Sería bueno dar masajes al área a medida que se aplique el
hielo, para que el mismo no lastime la piel (seguramente no querrá agregar más
problemas).



  1. Compresión

 También envuelva la
rodilla (compresión) con un refuerzo o una venda para proporcionar presión a la
misma. Recuerde que este vendaje no debe ser demasiado apretado. Para corroborar
que el vendaje esta bien hecho, se debería ser capaz de meter fácilmente dos
dedos debajo de la venda. Es importante, verdaderamente esencial, que se
mantenga la circulación en el área.



  1. Elevación



 
La elevación significa
levantar la rodilla. Póngase cerca de una silla al sentarse, y apoye allí su
pie.


¿Qué hacer si estos tratamientos no funcionan?

 Si estos procedimientos
no funcionan, y el dolor continúa, debe concurrir indefectiblemente a su doctor.
Existen muchas pruebas y tratamientos especializados que se puede hacer para
solucionar este problema, así como profesionales que se especializan en medicina
deportiva. Estos médicos (generalmente cirujanos ortopédicos) saben que su meta
es “volver a la cancha” (literalmente hablando) tan rápidamente como sea
posible. Ellos podrían prescribir medicaciones, terapias físicas, o simplemente
aplicaciones para sus zapatillas.


 La ayuda de las aplicaciones ortopédicas 

Las aplicaciones
ortopédicas han sido creadas para hacer el ángulo de “aterrizaje” algo más suave
y saludable. Por ejemplo, si los pies giran cuando golpean el suelo, se puede
diseñar una aplicación ortopédica para prevenir esto.



 
La ayudar de la terapia física

 Muy probablemente, el
terapeuta físico le pedirá que corra en una cinta para observar y estudiar de
qué forma se mueve cuando usted corre. El médico podrá entonces advertir si su
problema tiene raíz en su modo de correr, por lo que lo re-educará para
enseñarle a trotar de mejor forma, proporcionándole ejercicios y trabajos de
estiramiento, que podrá hacer antes y después de correr.

 Quizá deberíamos repensar
si los caballos son tan tontos en comparación con el ser humano… ellos saben muy
bien que no se debe correr en el pavimento, sino en superficies más blandas.

 Y quizás deberíamos
comenzar a seguir sus pasos (literalmente hablando), sin exigir tanto a nuestras
rodillas, las cuales estarán muy agradecidas. Si cree que es un problema
modificar su habitual ruta, piense en cuantos se ahorrará al darse la
oportunidad de optar por un camino más sano para sus rodillas.