Durante un año y medio mantuve una relación a distancia con una mujer latina. Casi todos los días charlábamos varias horas por msn, teléfono, micro... Compartimos alegrías y penas. Escuchábamos música juntos, éramos muy compañeros. Ambos coincidimos siempre al decir: ''Tú eres mi horma de zapato''. Ella tenía muchas cualidades. Pero varias veces se enojó y, cuando eso ocurría, estaba 5, 7, 10 días... sin aparecer. Y eso me hacía sufrir. Sin darme cuenta le dí mucho poder, así que ella llevaba la batuta en la ciber-relación. Hace apenas dos semanas, un día me dejó una frase muy fea y desagradable en mi msn. Cuando la leí, me quedó helado, me enojé. Y, por una vez, fui yo quien dio un golpe sobre la mesa. Horas después ella dijo disculparme y entender lo que sucedió, algo que le agradecí mucho. Lo peor estaba por llegar. Al día siguiente se despidió de mi... con cuatro frases muy agresivas en su msn. Y hacía poco tiempo me había dicho que ella, si rompe con un novio, pareja o lo que sea, se lo dice sin problema. En cada enojo actuaba igual: se escondía y si tenía que decirme algo, era con una frase en su msn, pero no en un email. Esta vez respondí, con agresividad, a sus cuatro frases agresivas. Y todo se terminó. Una semana después coincidimos en un chat. La reconocí por su nick y ella me reconoció a mí. Le envié un breve email, y ella respondió con una agresividad muy fuerte. Yo respondí en el mismo tono... y todo se terminó. Trato de curar mi herida, olvidarla, pensar en otras cosas. Sé que jamás me llamará, ni me dirá nada de nada por ningún medio. Y yo, desde luego, no me arrastraré para que vuelva una persona que por un enojo, desaparece ocho días. Lo que se acabó, se acabó... Fín.
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