La pintura blanca
Si se desea pintar de blanco, es recomendable agregar siempre un toque de color
a la pintura, ya que las pinturas blancas sacadas de la lata son de color blanco
tiza y debido al proceso de envejecimiento normal de la pintura, esta se pone
amarilla muy rápidamente.
Este efecto puede disminuirse con un simple toque de
color que además permitirá que dure inalterable mucho más tiempo
La altura de los cuadros
Los cuadros se cuelgan siempre a 1,60 m del eje de la visión del cuadro. Esto se
logra trazando diagonales y controlando que el centro esté a 1,60 m del piso.
Es
importante tener en cuenta que los cuadros nunca deben estar demasiado altos, ya
que produce una sensación desagradable ingresar a un ambiente con estas
características. Un cuadro es como una
ventana: debe verse lo que el pintor
quiso expresar a través del marco propuesto por el artista.
Eligiendo el color de la pintura
Cuando se adquiere un color preparado, siempre debe comprarse solo un litro y
antes que nada, probarlo. Luego de dejarlo secar, debe comprobarse que el color
coincida con el que se desea.
Esto conviene hacerlo ya que el color de los
muestrarios es simplemente un color de máquina y o es el mismo material que
viene en las latas. Es importante recordar que el color del muestrario siempre
suele ser más oscuro que el que se coloca en la
pared.
Entonando la pintura
Cuando se decide entonar la pintura blanca con tonalizadores, es recomendable
primero pintar un “testigo” blanco en la pared y luego ir comparando las
tonalidades que se van obteniendo.
Es muy común que los clientes elijan un color
en los muestrarios y después cuando lo colocan en la pared noten que cambia
demasiado.
Esto sucede porque la textura de la pared, la luz y el ambiente en
general influyen en la percepción de color.
¿Entrarán los muebles en el ambiente?
Los ambientes vacíos siempre parecen más chicos de lo que realmente son.
Cuando un ambiente está vacío siempre parece más chico porque no tiene
referencias de escala y no hay nada que pueda compararse para poder establecer
una medida lógica y correcta.
Para evitar sorpresas, siempre es recomendable
tomar las medidas con exactitud antes de decidir qué muebles se comprarán.
Pintar con colores oscuros los lugares de paso
Los tonos oscuros son altamente recomendables en pasillos o paredes de mucha
circulación. Como son oscuros, son más sufridos y duran impecables por más
tiempo que los colores claros, además de aportarle un estilo novedoso al
ambiente.
Los tonos claros como el blanco, beige o crema son colores
extremadamente delicados y si están muy expuestos a circulación y tránsito se
ensucian con rapidez. Pintar con colores otorga más vida al espacio y permite
que la pintura dure inalterable más tiempo.
Pintar con color no achica los ambientes
Los colores oscuros o fuertes le dan onda al ambiente y no es necesario pintar
todo el espacio de color; tal vez con pintar una pared de color fuerte y las
demás de un tono suave puede lograrse un efecto interesante que descubra nuevas
posibilidades de decoración en el ambiente.
En general se piensa que el color
achica el ambiente y en realidad no es así: basta observar que los fondos de los
escenarios son negros, justamente para generar el efecto contrario de
profundidad y amplitud que un ambiente necesita. Lo importante es que el color
esté bien elegido y combinado con otros tonos.
La importancia de una buena iluminación
Los artefactos lumínicos y la calidad de la iluminación artificial son claves a
la hora de decorar un ambiente. No conviene ahorrar en este rubro, adquiriendo
artefactos de calidad y garantía que aseguren una decoración funcional y
agradable.
La iluminación de los espacios es la clave que revela una adecuada composición
de estilos y recursos decorativos.
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