Eludiendo las ventas de tiempo compartido
Y de pronto te encuentras pasando unos días en un Resort de Florida. Y también tienes un cupón para una cena-show en un restaurante de categoría media.
¿Y todo gracias a qué? A haber aceptado un tour de tiempo compartido. ¿Cómo has llegado allí? Casi ni lo sabes…
Imagínate ahora en uno de esos puestos de venta de teléfonos celulares en un importante centro comercial.
Imagina que el agresivo vendedor sólo necesita una venta más para comprar el anillo de bodas a su futura esposa en la casa de empeños.
No obstante, quienes alguna vez han estado en un tour de tiempo compartido, recuerdan ciertas situaciones previas al viaje que son muy similares. Por ejemplo:
· El vendedor
Un vendedor sonriente estará a cargo de la presentación de la empresa y, asegurando que “esto no tomará mucho tiempo”, se mostrará interesado por tus experiencias previas en viajes vacacionales.
Dependiendo del vendedor, podrás sentirte inmediatamente relajado o, por el contrarío, una extraña sensación de escalofrío podría recorrer tu cuerpo. Existe un amplio rango de personalidades y abordajes entre los vendedores de tiempos compartidos.
Si has caído en manos de un vendedor agradable, con gran capacidad de retórica, deberás subir tu guardia. Sin dudas, este vendedor te hace sentir realmente a gusto, pero recuerda en todo momento que está haciendo su trabajo.
Y ese trabajo es venderte algo que posiblemente no quieres ni puedes pagar. Si te ha tocado el vendedor de la sonrisa forzada y de personalidad empalagosa, entonces la mala experiencia ya ha comenzado.
- El intento
Aquí es cuando escuchas sobre lo que va a suceder durante la presentación. Con frecuencia, se te pedirá mirar un breve video lleno de spots de destinos exóticos, tours de condominios paradisíacos, testimonios de propietarios efusivos y gráficos que hacen parecer a las compras de tiempo compartidos como excelentes negocios.
A continuación, el vendedor te llevará en un tour por sus mejores unidades, poniendo énfasis en los servicios, las instalaciones y las comodidades de los resorts, y dejando escapar anécdotas acerca de clientes satisfechos.
También te preguntará por tu familia, y destacará “esa hermosa pileta pera los niños”, “el balcón donde la abuela podrá tomar su campari vespertino”. Si intención será hacer que crees en tu mente la imagen de un propietario orgulloso y feliz.
- El precalentamiento
Esta etapa, si es llevada a cabo con eficiencia por el vendedor, debería asemejarse a una simple conversación casual. En esta conversación, hablarán sobre la terminología usada en el mundo de los tiempos compartidos y discutirán las necesidades vacacionales de tu familia.
Generalmente, los vendedores hablan de los viajes de vacaciones como algo que “debes tener”, como si se tratara de los víveres que necesitas para la subsistencia diaria, y como algo que debe formar parte del presupuesto familiar.
Asimismo, podrían definir al tema de las vacaciones como “un problema”, el cual ni siquiera sabías que tenías, y para el que ahora te ofrecerán la solución. Ah, un pequeño detalle: la solución será comprar un tiempo compartido.
- El precio
El vendedor te mostrará una lista con los precios. Generalmente, estos números están inflados intencionalmente, por lo que no causarán una buena impresión inicial en el potencial comprador.
De hecho, serán muy pocos los que se dejen seducir por estos números, y los vendedores de tiempos compartidos están al tanto de esto. Sólo están preparando el terreno para la fase final del plan…
- El acuerdo
A esta altura del juego, un “manager”, “director”, o “gerente”, hará su entrada en escena. Él o ella te ofrecerán un acuerdo “especial” al que la mayoría de la gente no suele acceder.
Entonces te encontrarás con un nuevo precio ante tus narices, significativamente más bajo que el primero.
- El convencimiento
En esta etapa, la negociación se volverá un poco más ruda. Ellos intentarán demostrarte que, dado tu presupuesto, tú puedes afrontar el gasto.
Ellos insistirán en que el precio es una oportunidad única, y que no podrán volver a ofrecértelo una vez que abandones esa oficina. Incluso, sus argumentos mencionarán a tus hijos y a tus padres —si es que los tienes— para hacerte firmar el contrato.
Es muy importante que entiendas que, incluso a esta altura, debes sentirte libre de levantarte y abandonar la sala.
También es importante aclarar que, para las personas indicadas, los tiempos compartidos son una alternativa legítima al pago de habitaciones en hoteles año tras año.
No obstante, también es justo decir que, si bien hay propietarios de tiempos compartidos que están felices con decisiones, son más los que lamentan haber sido convencidos.
Consejos para sobrevivir a un vendedor de tiempos compartidos
¿A qué debes estar alerta? Hay un montón de cosas que debes tener en cuenta a la hora de considerar la compra de un tiempo compartido.
Ahora te ofrecemos una lista con los puntos más importantes:
- Nunca vendas ni compres en ese momento. Ve a la cama y consúltalo con la almohada. Tómate un tiempo para evaluar si el acuerdo es verdaderamente conveniente para toda la familia.
- Si te ofrecen un premio como incentivo, lee la letra chica de este “premio”, y recuerda no pagar por el mismo.
- Lee el contrato y hazlo revisar por un abogado. Si la persona de ventas te ha ofrecido algo que no aparece en el contrato, no firmes.
- Si notas que ejercen demasiada presión durante la presentación, deja el lugar inmediatamente. Recuerda que tienes el derecho de irte cuando quieras.
Simplemente ponte de pie y di “muchas gracias pero tengo que irme”. Vete y no permitas que te retengan si ya no quieres estar allí.
- Pide referencias. Y luego llama a esas referencias. Pide contactos de personas que hayan estado conformes y personas que hayan estado disconformes. Lo menos que pueden hacer es ofrecerte los de aquellos que han quedado satisfechos. Si ni siquiera pueden hacer esto último, entonces harás bien en sospechar.
- Nunca llames a un número 1-900 para reservar un viaje; es muy posible que se trate de un engaño.
- Considera a un tiempo compartido con la misma seriedad que considerarías a cualquier otra inversión en bienes raíces. Investiga y edúcate. Conoce el mercado y los valores habituales.
- Considera la debilidad del mercado de reventa para los tiempos compartidos. Nunca compres un tiempo compartido con la idea de que estás haciendo una inversión. Si vale la pena por algo, es porque lo vas a usar, y no porque vas a revenderlo.
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