Apenas el sujeto está sentado cómodamente, empezará a relajarse diciéndose a sí mismo: “Estoy completamente relajado. Mi brazo derecho (o izquierdo) pesa enormemente.”
Ésta es la primera parte de la sugestión, que debe repetirse durante un minuto o dos. En seguida deberá concentrarse en las siguientes sugestiones: (No pasar a la siguiente hasta que no notes los efectos de la sugestión en la que estás concentrándote.)
1. Mi brazo está rígido.
2. Respiro profundamente.
3. Abro bien los ojos.
Durante una o dos semanas deberían hacerse escrupulosamente algunos ejercicios al día. Primero se sentirá pesadez en el brazo; más tarde esta sensación se extenderá a todo el cuerpo.
Segundo ejercicio: percepción del calor.
Sugestiones:
1. Estoy completamente relajado.
2. Mis brazos (piernas) pesan mucho.
3. El brazo derecho (izquierdo) está caliente.
La duración del ejercicio depende del tiempo en que el sujeto logre sentir la sensación de calor. En un par de semanas debería estar capacitado para producir dicha sensación en todas sus extremidades.
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