Los hematíes son las células sanguíneas de mayor número. Son producidos en la médula ósea, de modo que cuando logran su madurez son soltados al torrente sanguíneo a modo de células enucleadas.
Los hematíes son normalmente células sanguíneas con forma de discos bicóncavos, con un diámetro medio de 8 micras, de espesor de 2 micras y de 1 micra en el centro aproximadamente, siendo el volumen medio de 83 micras cúbicas.
La forma del hematíe cambia cuando atraviesa los capilares, y gracias a su exceso de membrana celular frente a la cantidad de materia que contiene, es capaz de estirar la membrana hasta el punto de no romperla, algo que ocurriría en el caso de una célula normal.
Los hematíes y el oxigeno
La principal función, por así decir, del hematíe es la de transportar hemoglobina y así llevar el oxigeno desde los pulmones a los diferentes tejidos. El proceso se cumple en cada inspiración, cuando el oxígeno llega a los alvéolos pulmonares y desde allí a la sangre por efecto difusión. Como la presión parcial del oxígeno en los alvéolos es mayor que en el resto de los pulmones, el oxígeno ira por desnivel de presión desde los alvéolos a los capilares sanguíneos. Será las arterias las que difundirán el oxígeno hasta las células, las cuales tienen un presión de oxigeno menor que la sangre arterial y es lo que le favorece para que llegue dicho oxigeno a ellas. En cuanto al CO2 que producen las células ocurre el efecto contrario, siendo recogido por la hemoglobina de los glóbulos rojos y es transportado a los pulmones.
Factores para la producción de hematíes
Son factores necesarios para la maduración celular el hierro, el ácido fólico y la vitamina B12.
El hierro es necesario para la formación de hemoglobina. La cantidad de hierro en todo el organismo va de 4 a 5 gramos, encontrándose la mayor parte en la hemoglobina. La necesidad de hierro en el hombre viene a ser de 0.6 miligramos al día para así equilibrar la cantidad que se pierde a través de las heces, sin embargo, en el caso de la mujer, las necesidades de hierro viene a ser del doble a causa de las perdidas que se dan en la menstruación.
La vitamina B12 es considerado como un elemento nutritivo esencial y necesario para la síntesis del ADN, multiplicación de todas las células, y para el crecimiento de todos los tejidos en general. Para que la vitamina B12 sea absorbida se hace preciso la unión con un factor intrínseco que se produce en la pared del estómago. La carencia de vitamina B12 deriva en una anemia perniciosa.
Por ultimo, el ácido fólico es igualmente necesario para la síntesis de hematíes, y su carencia puede ser causa de alteraciones en la maduración de las células, y por lo tanto, de una consabida anemia.
Los valores normales de los hematíes o eritrocitos
Recién nacido |
De 4 a 5 millones/ml |
A los 3 meses |
De 3,2 a 4,8 millones/ml |
Con 1 año |
De 3,6 a 5 millones/ml |
Entre los 3 y 5 años |
De 4 a 5,3 millones/ml |
Entre 5 y 15 años |
De 4,2 a 5,2 millones/ml |
Hombre adulto |
De 4,5 a 5 millones/ml |
Mujer adulta |
De 4,2 a 5,2 millones/ml |
Interpretación de los resultados
Es preciso que cuando se interprete los resultados con otras medidas de la forma, y aspectos, así como con los índices hemáticos, es decir, con la hemoglobina, el hematocrito, la VCM, la HCM y la VMHC.
Valores disminuidos son debidos generalmente por:
- Alteraciones en la dieta
- Anemias ocasionadas por varias causas
- Cáncer
- Enfermedades sistémicas
- Embarazo
- Fibrosis de médula ósea
- Hemorragias
Valores aumentados suelen ser debidas a:
- Cardiopatías
- Enfermedades pulmonares crónicas
- Estancias en lugares de gran altitud
- Poliglobulia de diferentes causas
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