Cuando el teléfono suena, póngase en alerta y nunca, por nada que sea, ofrezca información personal. Una técnica común que utilizan los ladrones de identidad es intentar que usted revele el número de cuenta bancaria, de la tarjeta de crédito, o el número de seguro social. Por lo general, fingen estar realizando llamadas oficiales. La conversación puede ser algo así: “Hola, Sra. Rodríguez, la estoy llamando de la oficina de seguridad de su banco; tenemos un problema con nuestras computadoras. Por favor, podría leerme los números en la parte superior de la chequera”. O, asimismo, pueden decirle que son de la compañía de la tarjeta de crédito, y que están investigando un posible gasto fraudulento en su cuenta. En estos casos, le pedirán que verifique el código de seguridad impreso en la cinta magnética en el dorso de su tarjeta.

No importa que tan convincente, sincera, o urgente puedan sonar estas llamadas; no son buenas. Los ladrones no necesitan apoderarse físicamente de sus cheques o tarjeta de crédito para poder delinquir. Ellos pueden acceder a sus cuentas sólo con los números. Su banco nunca lo llamará para pedirle información personal o para verificar cualquier número de cuenta.

Por otra parte, los ladrones de identidad suelen decirle que ha ganado un premio, y que necesitan su número de cuenta para depositar directamente el premio. Su intención es hacerlo excitar de tal manera que usted olvide los “protocolos de seguridad” y les proporcione la información personal. Ahora lo sabe: si recibe una llamada como ésta, se trata de un fraude. No de ninguna información personal ni envíe dinero para reclamar “su premio”. Algunos países tienen un registro que limita el número de llamadas de telemarketing que usted puede recibir. Si está en uno de esos países, suscríbase y la posibilidad de que lo timen se verá reducida.

Número de documento/seguro social

En otro orden, su empleador y algunas instituciones financieras pueden pedirle –po teléfono o también personalmente- el número de documento o seguro social, en tanto lo necesiten para temas de salario o impositivos. También lo necesitará cuando quiera obtener la licencia de conducir o el pasaporte. Las empresas le preguntarán por el número en caso de que vayan a librar un cheque a su favor. Otras veces, usted lo querrá para el simple mantenimiento de sus registros. Si el negocio (aunque sea la oficina de su médico de confianza) quiere que usted utilice su número de seguro social para el mantenimiento de sus registros, pídales que utilicen un número sustituto.

Piense dos veces antes de dar a alguien su numero de seguro social, o de completar algún formulario con el mismo. Haga estas preguntas antes de darle en número a cualquiera.

• ¿Por qué necesita mi número?
• ¿Qué ley señala que debe ser utilizado?
• ¿Cómo será utilizado?
• ¿Qué pasará si me rehuso?

A partir de las respuestas a estas inquisiciones, usted deberá decidir si quiere compartir su número de seguro social con la persona que tiene enfrente. Recuerde, al menos que tenga que utilizarlo, mantener siempre su número bajo la mayor confidencialidad posible. Cuando los ladrones de identidad se lo adueñan, pueden utilizarlo para obtener otras informaciones sobre su persona. La construcción del clon sería un hecho.