Hay una gran decepción cuando nos sentimos rechazados por lo que somos, por como nos vemos, o por como pensamos.

A nadie le gusta ser rechazado, y por eso es que muchísimas personas, prefieren ocultarse detrás de las apariencias, para evitar el rechazo público. Sin embargo, pienso, que mas de una de estas personas, están interiormente frustradas, porque no pueden dejar salir libremente su hombre interior, tienen que vivir dobles vidas, tienen que fingir una sonrisa cuando están mal, o tienen que aparentar no tener necesidad cuando por dentro están ahogados entre tantas deudas, miseria, otros ocultan simplemente sus temores mas remotos.
En mi vida he experimentado muchísimos triunfos; en el área de las relaciones humanas, en realidad, tengo que agradecerle a Dios, por la gracia que ha puesto en mi desde que era una niña, siempre he tenido la dicha y la felicidad de caerles bien a las personas, por lo general, siempre me es fácil hacer amigos, y no porque los busque yo, sino que simplemente surge una empatía entre la gente y yo, desde el primer momento en el que nos conocemos, y se nos hace fácil a ambas partes hacernos amigos.
Sin embargo, esto no significa que en mi vida no haya experimentado el rechazo, si lo he vivido, y ha sido precisamente, por como me veo, por como soy, o por como pienso. Hay muchísima gente que ni siquiera me dieron la oportunidad, de darle una sonrisa, a penas me vieron, porque cuando a penas nos cruzamos la mirada, la primera vez, me miraron con desprecio, como si yo no valiera nada, y algunas veces me pregunte a mi misma, ¿Por qué me miraran con ese rechazo?, Y aunque por una larga etapa de mi vida, tuve que lidiar con fuertes complejos, principalmente por mi apariencia física, nunca en mi vida he tenido que recurrir a las apariencias, nunca me ha gustado  fingir, ni quien soy, ni como soy, ni que tengo, ni alguna cosa por el estilo. Pero he visto, que mucha gente que conozco, se han puesto una mascara muchas veces, para aparentar lo que realmente no son, por temor de ser rechazados por lo que son. Podría citar muchos ejemplos de ello; Ejemplos:
*Personas ignorantes que no tienen ni idea de lo que los demás están hablando, y de repente se han inventado historias fantásticas, noticias, y a veces hasta dicen mil y un embuste con tratar de aparentar que saben bien del tema.
*Personas, que viven en un lugar pobre, con una casa cayéndose, pero cuando van a su lugar de trabajo o de estudio, aparentan delante de sus compañeros de que son gente de dinero, y gastan delante de los demás, en muchas cosas vanas, en vez de usar ese dinero, para invertir en las remodelaciones de su hogar, porque ellos necesitan vivir de apariencia.
*He visto muchas parejas, aparentar que se aman, y todo esta bien, mientras el hombre ha estado engañando por un lapso de tiempo a su mujer.
*He visto lideres, fingir esta bien, y poder tener el control y llevar las riendas de las funciones que conllevan su cargo, y por dentro se están muriendo por que sienten que no pueden mas.
 
*He visto mujeres, aparentar no ser celosas, para evitar que las rechacen o las critiquen y por años han intolerado la infidelidad de sus esposos.
Muchos han malgastado su vida, aparentando algo, y sosteniendo como una bandera, una imagen de algo, que ellos desearían con todo su corazón ser, pero no lo son. Y pienso que mas victoriosos serian en su vida, si de verdad se dieran la oportunidad de aceptarse como tal, y decidir, hacer que la gente los acepte, como son, por su puesto que si hay cosas que tienen que cambiar por su bien, lo hagan, pero no que traten de cambiar, para impresionar al mundo, aunque por dentro se están consumiendo, con su verdadero ser interior.

Dios dice: "No os mintáis, los unos a los otros, habiendo despojado del viejo hombre con sus hechos" Colosenses 2:9 La Apariencia, es una forma de mentira, cuando uno aparenta, uno no solo engaña a otros, sino que se engaña a si mismo. Si esa es o no, tu debilidad, Medita en estas palabras: "Entonces les dijo: Vosotros sois  los que os justificáis a vosotros mismos delante de los hombres; mas Dios conoce vuestros corazones; porque lo que los hombres tienen por sublime, delante de Dios es abominación" Lucas: 16:15 ¡Y recordemos siempre que Dios no mira lo que mira el hombre, sino que Dios mira el corazón!