El concepto del Yo y de la autoestima se desarrolla gradualmente durante toda la vida, empezando en la

infancia y pasando por diversas etapas de progresiva complejidad. Cada etapa aporta impresiones, sentimientos e incluso, complicados razonamientos sobre el Yo. El resultado es un sentimiento generalizado de valía o de incapacidad.

En general, las experiencias positivas y relaciones plenas ayudan a aumentar la autoestima. Las experiencias negativas y las relaciones problemáticas hacen que disminuya la autoestima.

La importancia de una autoestima elevada

Sentirse bien con uno mismo facilita:

• Enriquecer tu vida: Tener gente feliz a tu alrededor es una cosa apreciada. Siendo feliz podrás encontrar más amigos Sintiéndote mejor contigo mismo y siendo más abierto, establecerás relaciones más estrechas.
• Aceptar los retos: Cuando tú tienes una autoestima alta no tendrás miedo de desarrollar tus habilidades. Querrás arriesgarte y probar cosas nuevas. Si no pruebas, no podrás madurar.

Algunos efectos comunes de una baja autoestima

• Falta de confianza en sí mismo
• Bajo rendimiento
• Una vida personal infeliz

Con una autoestima elevada tú podrás

• Ser la persona que quiere ser
• Disfrutar más de los demás
• Ofrecer más de ti mismo al mundo
• Mantener la confianza en ti mismo
• Permanecer tolerante