Hoy, más que antes, hay distintas opciones que hacen las alternativas más atractivas. “Existen las pinturas clásicas de siempre, pero también están las que tienen efectos, acrílicas, con glicerina, específicas o las ecológicas”, sostiene la decoradora de interiores española María Marta Caba. 

Pinturas con glicerina 

• Se aplica con facilidad y se seca rápidamente.
• Se diluye en agua sin problemas
• Permite aplicar dos capas en un mismo día
• No se debe lavar rápidamente ya que este tipo de pintura es más frágil que el resto.

Pinturas específicas 

• Existe cada una en particular según la superficie que sea. Madera, metal o plástico
• Suelen necesitar solamente una capa de pintura, lo cual es realmente muy práctico.
• Hay que tener cuidado ya que algunas de estas pinturas cambia de color cuando se seca, por tal motivo puede necesitarse un retoque para lograr homogeneidad

Pinturas con efecto 

• Yeso o para barnizar o encerar
• El yeso se aplica de manera muy sencilla con una esponja. Se moja la esponja en la pintura diluida y con pequeños toques se pinta la pared.
• También se puede utilizar un paño. Se aplica el color con una brocha y luego se frota la superficie con el paño
• El yeso para encerar necesita de varias capas. La primera capa debe dejarse secar unas seis horas. La cera que se vende junto al yeso debe colocarse con una esponja. La cera no debe estar líquida. Si lo está, se puede introducir en la nevera para que se endurezca.

Pinturas ecológicas 

• Son aquellas que respetan el medioambiente.
• La gama de colores es realmente muy extensa.
• Se pueden hallar en el mercado productos naturales con barnices, ceras y demás elementos que hacen que se logre una textura que por un lado luce muy bien y no transmite toxicidad.

Pintura acrílica con textura 

• La textura arenosa es muy protectora.
• Se debe aplicar con una brocha grande y plana.

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