Al
llegar a cierta edad (entre los 40 y los 60 años) la mayoría de las personas
tiende a sentir cierto cansancio corporal, tienen menos ganas de realizar sus
rutinas laborales diarias, menos energía, etc.
Esto casi siempre se atribuye al
cansancio, al estrés, al aburrimiento que causa el paso de los años siempre
realizando la misma actividad.
Pero lo
cierto es que muchas veces esto se debe a la mala alimentación. El organismo
humano necesita de pequeñas dosis de energía, y esto se encuentra en alimentos
ricos en minerales y vitaminas.
Al
tener una dieta saludable y bien suministrada seguramente nuestras dolencias
disminuirán notablemente.
También las
dietas para bajar de peso suelen intensificar los “bajones” en los estados de
ánimo.
En el caso de
las mujeres cuando entran en la segunda mitad del ciclo menstrual – unos diez
días antes de la menstruación – pueden llegar a sentir aún más hambre, antojos
de cosas dulces y depresión.
También el
invierno y el otoño suelen traer estos malestares ya que al ser más cortos los
días, la sensación de cansancio o depresión suelen aumentar. Y si nuestro hábito
alimentario es malo peor aún.
¿Cómo
contrarrestar esto? Con una buena dieta energética. Para lograr esto lo ideal es
aportarle energía al cuerpo durante todo el día. Esto evita la fatiga, la
ansiedad.
El plan
incluye cuatro comidas diarias preparadas con alimentos que garantizan un aporte
importante de vitaminas y minerales (aclaramos que siempre antes de iniciar un
plan dietario como el que le brindamos a continuación debe consultar con su
médico de cabecera).
VITAMINAS Y MINERALES
·
La
vitamina A es importante para cuidar la piel, es antioxidante, y también
interviene en las defensas del organismo. Esta se puede encontrar en alimentos
como el hígado, la zanahoria y el brócoli.
· La
vitamina B (se divide en B1, B2, niacina, ácido pantoténico, B6, biotina y B12)
es la que interviene especialmente en el suministro de energía al cuerpo. Cuando
hay una falta de esta vitamina la persona experimenta depresión, dificultad para
concentrarse, cansancio, malestar general.
Por ejemplo la falta de vitamina B12
suele ocasionar anemia que empeora el cansancio y hace disminuir las defensas
ante posibles infecciones. La vitamina B1 la podemos encontrar en las legumbres,
cereales integrales, levadura de cerveza. La B2 en el hígado, los lácteos y los
cereales.
La Niacina en carnes, legumbres y hongos. El Ácido Pantoténico también
en el hígado, las nueces y en las paltas. La vitamina B6 la podemos encontrar en
la banana, en la papa. La Biotina en el hígado, los porotos de soja, y en los
hongos. Y por último la vitamina B12 se encuentra en las carnes de todo color,
en los lácteos y en los huevos.
·
La
vitamina C es la que fortalece el sistema inmunológico y al igual que la
vitamina A también es antioxidante. La falta de esta vitamina suele ocasionar
fatiga, cicatrización dificultosa, insomnio, dolores articulares, y pueden ser
propensos a infecciones.
Las personas que fuman necesitarán aún más de su
suministro. Esta vitamina la podemos encontrar en los cítricos, los kiwis, y los
ajíes morrones.
· La
vitamina E también es antioxidante y por lo tanto sirve mucho para retrasar el
envejecimiento. Esta se puede encontrar en las semillas de girasol, germen de
trigo y en las frutas secas.
·
De los
minerales, el calcio ayuda a la tonificación muscular, interviene en la
contracción muscular y ayuda a controlar los impulsos nerviosos. El calcio se
encuentra en alimentos como el queso, el pescado enlatado con espinas y en la
leche.
·
El
yodo sirve para mantener el ritmo metabólico, la actividad física y mental y
para mantener el peso. El yodo se encuentra en los alimentos marinos, la sal
yodada y las algas.
·
El hierro permite que el cuerpo tenga energía y que los glóbulos rojos lleven
oxígeno a todo el organismo. Su falta altera la capacidad de trabajo y el
rendimiento intelectual.
También puede
producir poca resistencia ante enfermedades. Este mineral se encuentra en el
hígado, en las carnes rojas y en las lentejas.
· El
magnesio también brinda energía y su déficit suele producir debilidad muscular,
depresión y estados irritables. El magnesio puede encontrarse en los cereales
integrales, las frutas secas y tofú.
· El
manganeso y el fósforo otorgan rigidez a los huesos del cuerpo y sobre todo
fortalece la dentadura (al igual que el calcio). El manganeso se encuentra en
los cereales integrales, frutas secas, y verduras de hoja. El fósforo puede
encontrarse en lácteos, pescados y porotos.
· El
potasio elimina el exceso de sodio y su escasez puede ocasionar debilidad
muscular y cansancio corporal. Este se puede encontrar en las bananas, papas y
damascos secos.
· La
escasez de sodio puede ocasionar calambres, sed y debilidad muscular. Esto suele
ocurrir en épocas de mucho calor donde la sudación es alta. El sodio se
encuentra en la sal de mesa, los cubitos de caldo y los productos enlatados.
A
continuación le brindamos una dieta semanal con especial atención en estos
minerales y vitaminas para aumentar la energía corporal y así evitar la
sensación de cansancio.
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