La dieta de las mujeres francesas
Las mujeres francesas no engordan
Si alguna vez se preguntó cómo es que los franceses consiguen comer queso,
manteca, baguettes, y beber vino, y mantenerse delgados, entonces “Las
mujeres francesas no engordan: el secreto de comer por placer”, de la
francesa Mireille Guiliano, puede ser el libro ideal para usted.
“Las mujeres francesas no engordan…” es en realidad un libro de no-dieta,
cargado con sabios consejos de la elegante y bella Mireille Guiliano, quien
también es directora de la compañía de champagne “Veuve Clicquot”.
Cuando era adolescente, la autora fue a los EE.UU. para estudiar y regresó a su
casa con 10 kilos más que cuando se había ido, culpando a las grandes porciones
y a los dulces.
Aplicando los hábitos alimenticios de las mujeres francesas,
ella bajó los kilos que había subido, con un nuevo panorama de la comida, la
bebida y el estilo de vida, que comparte en su libro.
La premisa básica de “Las mujeres francesas no engordan…” es que usted
debe comer sólo alimentos de buena calidad en pequeñas porciones, y saboreando
cada bocado.
Ya sea chocolate o champagne, tráguelo despacio, comiendo con todos los
sentidos, y haga que cada experiencia gastronómica sea agradable para usted, lo
que le permitirá sentirse satisfecho con
porciones más pequeñas.
Ningún alimento
está prohibido, lo que está prohibido son las porciones grandes. Sin tener que
contar las calorías, sin saltearse comidas, simplemente controlando lo que come.
No es una solución rápida ni una dieta de moda, “Las mujeres francesas no
engordan” es un plan de tres meses de duración destinado a restablecer la
normalidad en el cuerpo, un peso saludable por medio de la pérdida lenta y
gradual de peso.
A muchos les gustará el hecho de que este plan no incluye clases de ejercicio
físico, sino sólo mucha actividad física diaria y mucha caminata.
La autora
muestra cómo las mujeres pueden adoptar el estilo francés de comer, beber y
moverse como la mejor fórmula para controlar el peso.
Lo que puedes comer
Una comida del plan “las mujeres francesas no engordan” puede consistir en una
sopa de puerro, seguida de carne o pescado, verduras y una fruta.
Durante la
fase inicial, las personas que siguen esta dieta deben evaluaran sus dietas
llevando un registro de los alimentos que ingieren, para identificar de donde
proviene el exceso de calorías. Usted puede seguir comiendo sus comidas
favoritas, pero trate de reducir la frecuencia o la cantidad.
Después de realizar el seguimiento de sus hábitos de alimentación, se recomienda
realizar pequeñas mejoras saludables, como beber más agua para mantenerse
hidratado y eliminar las toxinas.
A lo largo del libro “Las mujeres francesas no engordan”, Guiliano
describe los hábitos de las mujeres francesas que generan una cintura esbelta,
sin negación o culpa.
Ella ofrece un enfoque positivo para el control del peso,
que incluye vino, chocolate y pan, que suelen ser rechazados y excluidos en la
mayoría de las dietas.
Incentiva a los lectores a disfrutar de las comidas
y las bebidas al máximo, manteniendo las porciones bajo control. Los
ingredientes frescos y saludables son muy recomendables.
Guiliano también recomienda comer una variedad de alimentos saludables para
sentirse más satisfecho sin sentirse privado. Comer siempre la misma comida es
un mal hábito, por lo que la autora sugiere probar nuevas recetas, sabores e
hierbas.
No hay alimentos prohibidos en el plan de “Las mujeres francesas no
engordan”, siempre y cuando las porciones se mantengan bajo control.
¿Tiene un antojo de algo dulce? Satisfágalo con unos pocos bocados o con una
pequeña porción de un alimento que usted desee. ¿Le gusta el vino? Disfrútelo, pero sólo un vaso.
Poco a poco reduzca el tamaño de las
porciones gradualmente, por lo que no se dará cuenta de que está comiendo menos.
Es inevitable que haya derroches y, cuando eso suceda, Guiliano recomienda comer
yogur. El yogur es el alimento perfecto, está lleno de calcio, y las francesas
comen 1 o 2 porciones por día.
Especialmente después de una noche de excesos, es
el desayuno perfecto, y
también se recomienda como una buena merienda.
¿Cómo funciona esta dieta?
La premisa fundamental del plan de no dieta de “Las mujeres francesas no
engordan” consiste en aprender a disfrutar del placer de comer una comida
deliciosa en un ambiente relajado.
Guiliano cree que las mujeres de todo el mundo se beneficiarían si bajaran un
cambio, dejara de comer a las apuradas y se tomara la experiencia de comer de
forma más placentera, como hacen las francesas.
Coma con todos sus sentidos y deguste cada bocado a consciencia, para saborear
la comida y darse cuenta de cuándo está lleno. Tres bocados es todo lo que se
necesita para disfrutar de la comida.
Siéntese despacio,
mastique bien y coma sin distracciones: apague la televisión, deje el libro, y
concéntrese en comer.
Con “Las mujeres francesas no engordan”, el objetivo es olvidar la culpa
por comer y sustituirla por placer.
¿Qué dicen los expertos?
En primer lugar, vamos a poner algo en claro, las mujeres francesas engordan y
la tasa de obesidad en Francia está creciendo rápidamente. "Las mujeres
francesas no engordan”, como muchos otros libros de dietas, es una mezcla de
una frustrante visión realista, ciencia débil, y pura especulación.
Giulano no
es ni nutricionista ni una profesional de la pérdida de peso y, aunque ella no
tiene la pretensión de serlo, basa sus consejos en sus experiencias y
observaciones personales de la vida en Francia.
Algunas de las recomendaciones de “Las mujeres francesas no engordan” son
acertadas, como caminar para hacer ejercicio, el entrenamiento con pesas para
mujeres mayores de 40 años, y comer sopa de verduras.
Se ha demostrado que
comer sopa con muchas verduras ayuda a reducir la ingesta de calorías
naturalmente. Sin
embargo, la evidencia científica no es compatible con la
afirmación de la autora de que los puerros tienen una cualidad mágica para bajar
de peso, ni que el chocolate contiene serotonina, un neurotransmisor que hace
que uno se sienta bien.
Además, algunos expertos sugieren que la verdadera razón por la que muchas
mujeres francesas son delgadas podría ser porque fuman muchos cigarrillos para
reducir su apetito.
En resumen
“Las mujeres francesas no engordan” podría ser un enfoque útil para bajar
de peso para las mujeres que aman la buena comida, el vino y el chocolate, y
desean una dieta flexible y que les permita comer lo que les gusta.
Este plan, sabiendo que ningún alimento está prohibido, puede resultar muy
alentador para algunos siempre que puedan controlar el tamaño de las porciones y
si la mayoría de los alimentos que elijen so nutritivos, como la sopa de
verduras y el yogur bajo en grasas.
La gente se aburre de las dietas y retoma sus hábitos alimenticios, y ese es el
motivo de por qué las dietas no funcionan". El enfoque es
simple: no se prive de sus comidas favoritas, simplemente aprenda, con el
tiempo, a disfrutar de las porciones más pequeñas.
Suponiendo que comer más lento y más conscientemente realmente conducirá a la
sensación de saciedad, la pérdida de peso con el plan de “Las mujeres
francesas no engordan” debería llegar lentamente, pero sin pausa.
Sentirse
satisfecho con porciones más pequeñas es el truco para que este plan funcione.
Isabel de los Ríos, nutricionista certificada, es autora de "Comer para perder", una obra que utiliza un enfoque original y alternativo para adelgazar en forma permanente y saludable. Encuéntralo haciendo clic aquí