2. Los socios: ¿Quiénes son los socios clave detrás del proyecto?
¿Quiénes desarrollan el negocio? ¿Cómo es el historial de socios y qué
experiencia tienen? Póngase en el lugar de los inversores para obtener una mejor
perspectiva.
No es un razonamiento complejo. Es sentido común comercial. La
experiencia que los socios le aportan al proyecto y qué tan cómodo se sienta el
inversor con su nivel de experiencia es lo que influirá en su decisión.
3. La financiación: muéstrele los números reales. Lógicamente, esto es un
poco más complicado para una empresa nueva, porque la mayoría de los números de
los ingresos serán cifras proyectadas, no reales.
Aquí es donde la experiencia
previa puede ayudarlo superar ese obstáculo. Muéstrele al inversor, con la mayor
precisión que pueda, como el proyecto (ya sea un negocio o una inversión) va a
generar dinero.
Sea realista. Como inversionista, no quiero que me muestren el
mejor escenario posible. Quiero ver cifras realistas, incluyendo los problemas y
obstáculos que pueden aparecer.
Cada proyecto empresarial y de inversión tiene
problemas, pretender que el suyo no los tiene lo hará ver como un novato.
¿Cuánto dinero necesita reunir en total? ¿De dónde proviene ese dinero? ¿El
dinero está siendo reunido entre inversores particulares, prestamistas
tradicionales, fondos de pensiones o programas estatales?
¿Cuáles son las
condiciones? Por ejemplo, supongamos que me proponen invertir en el pago inicial
de un edificio de apartamentos. Me han dicho que el otro 80 por ciento proviene
de una institución de crédito.
¿Qué sería más atractivo para mí como inversor:
pedir prestado el 80 por ciento a una tasa de interés más baja, que debe ser
refinanciada en dos años, o conseguir el 80 por ciento a una tasa fija
ligeramente superior durante 25 años?
La primera opción presenta más incógnitas,
mientras que el segundo escenario presenta menor cantidad de posibles sorpresas.
¿Cómo va a utilizar el dinero que recaude? ¿A qué se destinarán los fondos
obtenidos? Un consejo: si llega incluso a sugerir que parte del dinero recaudado
será para pagarse a usted mismo como propietario de la empresa o del negocio, mi
bolsillo estará cerrado.
Si desea obtener beneficios, consiga un trabajo. Y, por
supuesto, tiene que responder a estas dos preguntas clave: ¿en cuánto tiempo
podré recuperar mi inversión inicial, y cuál será la tasa de retorno de mi
dinero?
El trasfondo de esta cuestión: ¿su estructura de financiamiento es
atractiva para un inversor?
4. La administración:
se dice que “el dinero sigue a la administración”, y es cierto. Sin embargo, su
discurso será mucho más efectivo si abarca los cuatro componentes, no sólo la
administración.
Los inversores quieren saber quién dirige las operaciones del día a día. Esto es
clave para el éxito de cualquier empresa.
¿Qué nivel de experiencia tiene el
equipo de administración? ¿Quiénes son? ¿Cuáles son sus antecedentes? ¿Qué los
hace importantes para alcanzar el éxito de este proyecto o negocio?
Si usted está iniciando su propio negocio o si está recaudando dinero para hacer
crecer un negocio ya existente, puede que los socios y el equipo de gestión sean
las mismas personas.
Eso no es un problema, en absoluto, siempre que la
experiencia y la pericia de estas personas generen confianza en los inversores.
Obtener capitales no tiene que ser un asunto laborioso e interminable. Si puede
concentrarse en las cuatro claves, y generar confianza en sus inversores,
entonces el dinero fluirá hacia usted.