Cómo gastar menos en tu computadora
No es necesario comprar una PC nueva para tener una maquina con mayores
prestaciones. Sobre todo, si se la desea principalmente para escribir e
imprimir, antes que para trabajar con imágenes o sonido.
En efecto, en estos casos, es muy factible actualizar la vieja computadora con sólo comprar algunos insumos, aunque es necesario ser muy cuidadoso a los lugares que se concurra, y al elegir los componentes.
Por eso, antes que nada, se recomienda recurrir siempre a services oficiales o casas serias, que estén instalados desde hace un cierto tiempo y tengan antigüedad en el mercado, y hayan sido recomendadas por gente de confianza.
También es importante caminar mucho para buscar precios, pero, como señalamos, no dejarse tentar por aquellas ofertas provenientes de negocios que no tengan un adecuado respaldo, ya que, como se sabe, lo barato sale caro, y esto es especialmente cierto en el rubro de la computación.
Al realizar la compra
Una vez que haya optado por el negocio y técnico más pertinentes, en relación con la confianza y el precio, será hora de elegir los componentes con los cuales actualizará su computadora. Para ello, debería tener en cuenta las siguientes sugerencias:
En primer lugar, se debe saber que el teclado, la disquetera, la lectora de CD/DVD y el mouse suelen tener siempre las mismas prestaciones, por lo que se podrían seguir utilizando tranquilamente los de la vieja PC.
También es importante que se sepa que, para lograr una rápida computadora, tanto la calidad del motherboard, es decir la placa madre, como la del gabinete, son mucho más importantes que la velocidad del microprocesador.
En el mismo sentido, la cantidad de memoria RAM (que debe ser al menos de 2Gb) es más importante que la velocidad del microprocesador. El nuevo disco rígido que se incorpore, por su parte, no debe ser menor a 80 gigas, pero tampoco es necesario que sea mayor, si la computadora será destinada al uso hogareño.
Tintas alternativas
A la hora de reponer el cartucho de la impresora, se puede optar por uno reciclado, es decir que haya sido recargado. Esta opción, permitirá realizar un ahorro efectivo de entre un 30 y 50 por ciento sobre el precio del original.
Claro que la tinta que se recargue debe ser de buena calidad, por lo que se debe estar muy atento de no concurrir a aquellos comerciantes inescrupulosos que rebajan la tinta con agua. En este caso, las impresoras podrían dañarse gravemente, en especial las de marca Epson.
Así, si la recarga ha sido mal efectuada, no sólo se podría reducir la calidad de la impresión, sino también de la impresora en si misma, por lo que es muy necesario buscar una empresa que de garantías y respaldo, ya que de otro modo, como señalamos, se pone en riesgo la impresora.
De todas formas, según afirman los especialistas, si el cartucho es recargado correctamente, es decir con todas las medidas de seguridad y de calidad requeridas, el rendimiento de la impresora debería ser exactamente el mismo que con un cartucho original.
También existen dos opciones más, aunque actualmente sólo disponibles para cartuchos Epson y algunos Cannon: los genéricos, es decir aquellos cartuchos que no son fabricados por estas marcas, pero se pueden utilizar sin inconvenientes en las impresoras de las mismas, o bien los kit de recarga, que traen todo lo necesario, incluidas las instrucciones, para efectuar la recarga en casa.
Por último, si no necesita efectuar impresiones de muy buena calidad, podría adquirir una vieja máquina impresoras matriz de punto, pues su costo de mantenimiento es, por lejos, el más económico.
Tenga en cuenta, finalmente, que si debe concurrir al service de la impresora de chorro a tinta, debe quitarle los cartuchos genéricos o reciclados, ya que si los ven, no le reconocerán la garantía.
Otras formas de reducir costos
Para lograr que la tinta se consuma menos y pueda así rendir más, se recomienda efectuar las impresiones en la opción “modo económico”, a la que se puede llegar, en los programas Windows, haciendo un click en Imprimir> Propiedades> “modo económico”.
En este sentido, es útil también que compre un papel de buena calidad, ya que los de baja calidad absorben mayor cantidad de tinta, por lo que el ahorro en el gasto de papel, será insignificante en comparación con los mayores gastos de tinta.
Igualmente, con el objetivo de ahorrar papel, debería reimprimir los trabajos borradores en la otra cara de las hojas que contengan, también, trabajos borradores, o bien fallidos.
Con el objetivo de no gastar en software, podría reemplazar las actualizaciones del Office de Windows por los paquetes similares gratuitos como Open Office o las alternativas online como las que ofrece Google.
Para ahorrar pulsos telefónicos, puedes utilizar los programas de telefonía sobre IP como Skype o la comunicación multimedia a través de tu mensajero instantáneo (como Messenger).
De lo que se trata, en definitiva, no es de renovar la computadora o de dejar de adquirir insumos para estas máquinas, sino de optimizar las opciones con las que se cuentan, para obtener los máximos beneficios, al menor costo. Quién le dice, tal vez comience incluso a gastar menos de lo que lo hacía hasta ahora...