Vivir con un ingreso fijo puede provocarle un cambio. Cada persona tiene una situación financiera personal diferente, pero el estar sin una planificación puede dejarlo en la ruina. Los planes financieros son más eficaces cuanto más preparados estén los individuos para poner en acción sus elecciones.
Deseos
y necesidades:
Conocer
lo que queremos no siempre es fácil. El principal factor para obtener lo que
quiere, es saber la diferencia que hay entre deseos y necesidades.
Alguna
vez pensó: ¿si tuviera más dinero haría…? Tener más dinero no ofrece una
cura instantánea, desear dinero no lo hace existir. Necesitamos ser realistas en nuestras expectativas; cuando permitimos que
el dinero nos controle, los conflictos se incrementan paulatinamente.
Es
muy importante aprender a reconocer la diferencia entre deseos y necesidades.
Una necesidad es algo sin lo que usted no puede vivir: como comida, ropa y
techo. Un deseo es algo que a usted le gustaría tener realmente, pero que puede
ser sustituido por otra cosa.
La
clave está en pensar en un plan. Bosquejar qué es lo que quiere y cómo
conseguirlo le ayudará a hacerse cargo de su propia situación financiera, y a
reducir un poco del stress de la vida cotidiana. También brindará seguridad.
Conocer
lo que usted tiene
Sea
consciente de lo que tiene. El tener más cosas no necesariamente es mejor. ¿Necesita
todas las cosas que tiene? ¿Es tener estos elementos lo que provoca que gaste más
dinero y no ahorre?
Tome
una mirada honesta a las entradas, inversiones, y
gastos
corrientes. ¿Cuenta
con un fondo para las emergencias? Manténgase al tanto de cuánto dinero tiene
y hacia dónde va.
Sepa
dónde va su dinero
Anote
cada elemento que compra y el monto que gasta. El llevar un registro exacto de
sus gastos le ayudará a conocer exactamente a dónde va su dinero, luego puede
considerar las opciones posibles. Asegúrese de verificar sus gastos por un par
de semanas antes de crear un plan.
Cerciórese
de anotar los gastos fijos, los flexibles y los ocasionales. Los fijos son los
costos que se mantienen iguales todos los meses. Los flexibles son aquellos que
varían. Los ocasionales son pagos trimestrales, anuales, de estación,
planeados y no planeados.
Recuerde
también de incluir en los gastos, los pagos de mantenimiento de cuentas y préstamos.
Muchas personas quiebran debido a un exceso de gastos personales.
Puede ser fácil
tomar un crédito, pero un exceso en el mismo le hará más difícil llevar
adelante su plan. El tener crédito no significa que usted lo tenga que usar.
Elija
su plan de acción
Compare
el dinero que tenga disponible con el dinero gastado. Fíjese prioridades para
gastar. Conozca sus límites y ajústelos a sus pagos. Busque soluciones
creativas y luego escriba su plan.
El
fijarse objetivos a corto y largo plazo le da un motivo a su plan. Revea sus hábitos
corrientes de compra. Usted, ¿compra porque necesita? ¿O porque tiene que
encontrar algo para comprar?
Recuerde
que está bien decir que no. Si
apenas puede pagar las necesidades mínimas, el decir “no” a las cosas que
no son imprescindibles, le puede ayudar.
Tener un plan financiero le puede
ayudar a decir que “no” cuando sea necesario. Debe estar atento a pensar en otras elecciones.
La
situación financiera personal de cada persona es única, haga lo que funcione
para usted. Piense en forma positiva. Rechace compararse a sí mismo con lo que
hacen los demás. Sea realista en sus elecciones.
Planee a futuro. Considere
actividades o cosas sustitutas que pueda hacer por poco dinero o gratis. Quizás
un trabajo extra a medio tiempo, o realizar algún hobby le pueda proveer de una
entrada extra.
Una
vez que elija su plan de acción, póngalo a prueba durante un mes o dos. Revea
y ajuste su plan financiero hasta conseguir que funcione para USTED.
Mantenga
parte que funcione, y decida qué necesita ser ajustado. Su esquema de acción
necesitará ajustarse periódicamente según los cambios que ocurran en su vida.
El
factor principal para obtener lo que usted quiere es conocer la diferencia entre
necesidades y deseos.
En
resumen
Un
plan financiero debe empezar entre 10 a 15 años antes que se jubile. Los que se
hacen más temprano funcionan mejor. No siempre prevendrá todos los problemas,
pero puede prever algunos y hacer que los otros sean más fáciles de manejar.
Hágase
las siguientes preguntas:
-
¿Puedo
encontrar una forma de gastar menos dinero que mis ingresos? -
¿Qué
necesito para cambiar? -
¿Cómo
estoy preparado para cambiar? -
¿Debo
planear para ahorrar para el caso de emergencias? -
¿Mis
gustos y deseos se ajustan a la realidad?
Informándose
antes de realizar sus elecciones, puede
crear un plan financiero que funcione para USTED.
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