Jugar a la lotería
Usted tiene mayores probabilidades de ser asesinado por un león salvaje o ser
electo presidente que de ganar el multimillonario premio mayor de la
lotería. Por algo se relaciona a la lotería con los sueños.
Autos nuevos
Comprar un coche nuevo es una de las principales maneras de cortar el dinero en
pequeños pedazos y tirarlo al viento.
En el momento en que usted sale del concesionario manejando su vehículo nuevo y
brillante, se deprecia su valor hasta un 40% del precio que usted acaba de pagar
unos segundos antes
(en condiciones de economía estables, obviamente).
Por lo tanto, si usted paga US$25.000 por un auto nuevo, a unos segundos de
haberlo comprado, valdrá sólo US$15.000.
Al final del tercer año, su bebé de 4 ruedas valdrá un 40% de su precio
original. Si usted está pensando en mantener su auto durante más de 3 años, sólo
va a empeorar. Cuanto más viejo sea el auto, más se deprecia su valor.
Recuerde que es imposible saber si usted va a tener un accidente o no, lo que
potencialmente podría destruir su auto. Recuerde, usted puede ser el mejor
conductor
del mundo, pero ¿qué pasa con los demás?
Agua embotellada
El agua embotellada es lo que sigue en la lista. El agua embotellada no sólo es
un gasto totalmente innecesario en todos los casos salvo en los más extremos,
también es extremadamente perjudicial para el medioambiente y para su billetera.
Si bien actualmente se discute sobre la seguridad de muchos plásticos y otros
ingredientes que se encuentran en el agua embotellada, especialmente la que
viene en botellas de plástico, lo que no se discute es el efecto sobre el
medioambiente.
El agua embotellada afecta claramente al medioambiente, de forma muy negativa.
Incluso aunque uno tire las botellas de plástico en el contenedor para
reciclaje, no significa que la botella vaya a ser reutilizada; probablemente sea
arrojada en un relleno sanitario o al río.
Cada botella que uno compra y tira tiene, en promedio, un 28% de probabilidades
de ser realmente reciclada adecuadamente.
Tenga en cuenta que, debido a las prácticas de reciclaje inadecuadas y al
aumento del uso de plástico en todo el mundo, algunas zonas del Océano Pacífico
contienen más partículas de plástico que plancton.
La fauna marina consume este plástico, algunos animales son capturados por las
empresas pesqueras y el plástico vuelve a su plato. Usted se está comiendo las
botellas de agua que tira, sin exagerar.
Por otra parte, no hay ninguna prueba clara de que tomar agua mineral sea más
saludable que tomar agua de la canilla.
Si bien el agua de la canilla no está muy limpia, ya que contiene productos
químicos nocivos, plásticos, pesticidas y otros elementos peligrosos, no hay
evidencia de que el agua embotellada no contenga las mismas sustancias.
Es preferible comprar un filtro de agua y llenar sus propias botellas de agua
libre de BPA. La mejor razón para llenar sus propias botellas de agua es la
cantidad de dinero que ahorrará a largo plazo.
¿Piensa que la nafta es cara? ¡El agua embotellada cuesta hasta 3 veces más por
litro! Además, el agua embotellada cuesta más de 1.000 veces más que el agua de
la canilla, agua por la que uno paga todos los meses.
¿La peor parte? Muchos estudios han demostrado que muchas aguas minerales son
simplemente agua de la canilla.
Por ejemplo, en
promedio, cada persona en EE.UU. consume 167 botellas de plástico de agua
mineral por año. Puede usar este cálculo para averiguar el derroche anual de una
persona, suponiendo que esté en el promedio de consumo.
Si uno compra 167 botellas de agua al año, a un precio mínimo de US$1,50 por
botella (algunas botellas de agua podrían costar hasta US$5 por botella) uno
estaría gastando US$250 por año.
Compare este gasto con comprar un filtro de agua y una botella de agua para
reutilizar y la compra se paga sola, incluso antes de cumplirse un año. Recuerde
que el filtro y la botella pueden ser reutilizados casi ilimitadamente.
Nota: el único caso en el que resulta tentador comprar agua embotellada es
durante un viaje, cuando no se sabe si es seguro tomar agua de la canilla.
En este caso, se aplica la misma sugerencia: compre botellas de agua libre de
BPA reutilizables, y sólo tendrá que rellenarlas cuando vuelva a su hotel o
alojamiento.
Usted incluso puede conseguir un purificador de agua pequeño y liviano, para
llevar con usted y asegurarse de que su agua sea completamente segura.
Si usted vive o está de viaje en América del Norte, una gran solución es
aprovechar las máquinas expendedoras de agua purificada, una idea que muchas
compañías de agua embotellada están implementando.
Estas máquinas suelen encontrarse en la puerta de los supermercados.
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