El mercado de acciones para principiantes

Antes de saltar de cabeza al mercado de bonos y acciones, debe conocer ciertos fundamentos básicos. En esta nota, le brindamos las claves para comenzar a invertir sin incertidumbres, y reduciendo los riesgos.


Invertir de una única manera, puede hacer crecer mucho su dinero, sobre todo si
hablamos del mercado de acciones y bonos. Sin embargo, no es poca la gente que
incurre en la equivocación de saltar al mercado sin hacer ninguna evaluación
previa, sin saber lo altamente necesario que es tener conocimientos de una gran
cantidad de puntos, antes de iniciar la inversión.

 Estas cuestiones, no son nada dificultosas de aprender, y no es necesario tener
un doctorado en economía para incorporarlos y ponerlos en práctica. Y cuanto
antes los sepa, más útiles le resultarán.

 En
primer lugar, es necesario que se familiarice con ciertos términos financieros.
Probablemente haya oído hablar de términos como “bull market” y “bear market”
(mercado toro y mercado oso si lo traducimos literalmente. Como es evidente que
esto no tiene mucho sentido en español, vale más que se familiarice con los
términos originales en inglés. Al fin y al cabo, de allí viene todo esto !!)


¿Qué significa esto? Un “bull market” es cuando un determinado mercado está
creciendo y la mayoría de las acciones están subiendo.

Por el contrario, en un
“bear market”, la mayoría de las acciones está en baja: sus precios son más
reducidos, por lo que puede ser una buena oportunidad para hacerse con ellas,
pero su rentabilidad puede ser muy baja y, posiblemente, en el corto plazo,
sigan bajando de precios, por lo que debería ser cauteloso y seguir las
tendencias. 

Al
comprar las acciones de una compañía, se está haciendo propietario de parte de
la compañía, y de parte de sus beneficios. Cuanto más “partes” o acciones
compre, más propiedad tendrá sobre la empresa en cuestión (aunque su propiedad
será, igualmente, una pequeña fracción de las grandes compañías que cotizan en
bolsa).

 Supongamos que tiene 2.000 dólares para invertir. Los coloca en una compañía que
vende cada una de sus acciones, a 20 dólares. Por lo tanto, usted puede comprar
100 “partes” de la compañía.

Si, al día siguiente, está compañía ha crecido (en
su rentabilidad, en sus activos, en sus mercados, etc.) el precio de cada parte
o acción de la compañía será, por ejemplo, de 22 dólares, por lo que usted habrá
ganado 2 dólares por cada acción.

Así, sus tenencias pasarán a costar 2.200
dólares, es decir que obtendrá una ganancia de 20 dólares, casi sin haberse
movido, en un solo día. Claro, también podría suceder lo mismo, pero a la
inversa, es decir que la compañía pierda rentabilidad, activos, mercados, etc.,
y sus tenencias bajen de precio…

Algunos factores a considerar antes de invertir

Deudas

 ¿Tiene alguna deuda? Salde estos compromisos en primer lugar. Los intereses de
una deuda, suben de forma exponencial, y pueden hacerle imposible alcanzar sus
objetivos financieros. Cualquier interés compuesto de las cuentas de su tarjeta
de crédito, puede hacerle perder todo, y mucho más, de lo que haya ganado en el
mercado de acciones.

Tacto y timing

¿Cuándo necesitará el dinero? Cuanto más tiempo mantenga su dinero invertido,
mayores chances tendrá de que crezca su
rentabilidad. Históricamente, los
mercados de acciones han dado ganancias globales del 10 u 11 por ciento anual.
Nadie sabe cuándo caerá un mercado, o cuándo se levantará. Nadie ha podido
tampoco predecir constantemente las fluctuaciones del mercado, pero sí se sabe
que, en el largo plazo, siempre da ganancias.

 Veamos que sucedería si usted invierte 100 dólares, al interés promedio de 10
por ciento anual, que otorga el mercado de acciones: El primer año, sus 100
dólares se habrán convertido en 110; el segundo, sus 110 dólares, se habrán
convertido en 121; el tercero, sus 121 dólares, se habrán convertido en 133. A
los cincuenta años, sus iniciales 100 dólares, se habrán convertido en 11.739.  

 Es
posible que no pueda ver muchos avances en el primer año de su inversión
(podría, incluso, ver pérdidas si ha elegido compañías incorrectas), pero, con
el paso del tiempo, comenzará a ver las bondades de esta composición.

No se
preocupe de las fluctuaciones y de los “bear market”, en el corto plazo, ya que
los mercados financieros siempre se recuperan, y los “bull market” siempre
regresan. Cuanto más tiempo mantenga su dinero invertido, más rentabilidad total
tendrá. 

Ahorro

 No
se puede invertir absolutamente todo el capital. Separa un poco de dinero, por
cada inversión que realice: no importa cuánto, pero no ponga en juego todo su
dinero. Si usted es mayor y tiene que pagar ciertas cuentas, hágalo, aunque eso
no significa que tenga permiso para gastar en cosas innecesarias. Si ahorra 50
dólares por mes, durante 12 meses, tendrá 600 dólares adicionales, seguros, al
final del año.

Riesgo

 ¿Es usted un tomador natural de riesgo? ¿Puede convivir sin mayores problemas,
con las fluctuaciones habituales del mercado?

Los mercados de acciones pueden
fluctuar muy a menudo, y pasar por épocas realmente dificultosas, como la de los
tiempos que siguieron al 11-S. Es necesario saber que uno es tolerante frente a
estos tipos de riesgos, antes de comenzar a invertir.

 Las inversiones de bajo riesgo, no están en el
mercado de acciones, sino en los
plazos fijos (siempre y cuando no sean un banco argentino), las cajas de ahorro,
el oro, el arte, y el clásico colchón.

Las inversiones de más alto riesgo, y
consecuentemente, con un potencial mayor (mucho mayor) de rentabilidad, son las
acciones, los bonos, y las Letes (Letras del Tesoro Nacional) que se cotizan en
la Bolsa. No existen inversiones de bajo riesgo con alta rentabilidad, salvo en
algunos monopolios otorgados por el Estado, preferentemente en Argentina.

Objetivos

 ¿Para qué está invirtiendo? ¿Qué objetivo planea alcanzar? Tal vez desee comprar
un auto nuevo, refaccionar su hogar, anotar a sus hijos en la mejor universidad,
o retirarse antes del mundo laboral y disfrutar cuanto antes de una vida libre.
Cada persona tienen sus propios objetivos al invertir, pero tienen algo en
común: Un Objetivo.

Por eso mismo, lo principal será que tenga una razón para su
inversión, sin importar cual sea ésta. Esto es así porque su objetivo estará
directamente relacionado con el tipo de inversión que deberá hacer, teniendo en
cuenta los riego y las rentabilidades.