Durante una búsqueda laboral, no existe sentimiento más gratificante que saber que saber que un potencial empleador ha observado su currículum y que usted se encuentra entre los posibles candidatos.
Después de todo, el currículum es el punto clave del proceso de contratación. Mucha gente suele adaptar su currículum a la posición para la que se está postulando, sabiendo que la incorporación de determinados aspectos podría hacer la diferencia y conseguir la tan ansiada entrevista.
Otras personas, eligen publicar sus currículums en bancos de datos o foros, en los que los managers pueden buscar al mejor candidato para un puesto determinado.
Por otra parte, las personas suelen promocionarse en el mercado laboral de distintas maneras. En Internet, por ejemplo, los empleadores suelen buscar profesionales en bancos de datos especializados.
Muchas otras veces, se cruzan con alguna información sobre su persona sin que usted siquiera imagine que anda pululando por los vastos océanos de la Web.
Después de todo, ¿cuántas veces ha navegado y visto páginas personales, currículums u otro tipo de información personal en la Internet? Seguramente más de las que puede imaginar. Y para que lo sepa, usted no está solo en esto.
Es posible que otros hayan visto sus datos o alguna publicación que haya realizado en Internet. Por lo tanto, es fundamental que mantenga el control de lo que la Web dice sobre usted. Y, en efecto, es importante que la Web no esté en su contra.
Weblogs: ¿una alternativa real?
En estos días, todos están desvariando y encolerizándose con los blogs. No obstante, son muchos los que los utilizan como diarios, agendas o merchandising personal. Otros, que han ido un paso más allá, han asumido el rol de periodistas “renegados”, intentando crear improvisadas empresas mediáticas a su alrededor.
Esto puede funcionar muy bien para quienes tienen el tiempo necesario para mantener un weblog para que otros lo lean. Pero para la mayoría, los blogs son escritos subjetivos, que mantienen las creencias y preconceptos de sus redactores y, por tanto, los tratan como tales.
Así que, mientras que un blog es un emprendimiento práctico que puede ponerlo en primera plana, lo cierto es que usted debería tener algo más útil que hacer en lugar de estar constantemente actualizando un diario para que otros lo lean.
De todas formas, un blog no es ni remotamente una pérdida de tiempo. Pero, si su propósito es exponer sus habilidades y experiencias, hay otros caminos por los que transitar.
El Factor Iceberg
Imagine la punta del iceberg representada por todas sus búsquedas laborales y pesquisas; por aquellos esfuerzos en vías de un trabajo digno y estable. En todas estas situaciones, usted controla el mensaje, diseñando el currículum apropiado que haga sonar el acorde que llame la atención del empleador.
Sin embargo, el resto del iceberg (una pieza mucho más grande que se esconde bajo la superficie), representa en conjunto a todas las oportunidades del mercado laboral.
Como profesional, usted siempre será investigado por aquellos que quieren ver qué tiene para ofrecerles (aún cuando usted ni siquiera lo imagine). Por lo tanto, usted necesita ubicarse en una situación de prevalencia frente a estos investigadores anónimos.
Sitio Web personal
Una alternativa sería tener un sitio Web dedicado a publicitar su perfil laboral, sus logros y características. También usted puede agregar algunos detalles personales para darle un contexto al hombre profesional y para que los demás vean lo que usted puede ofrecer en el aspecto humano.
Por supuesto, que la manera de hacer esto no es publicando una página personal sin cargo en un portal cualquiera, donde la única forma de llegar a su perfil de sería de casualidad, y esquivando fotos de adolescentes en fiestas de secundaria.
Lo que usted necesita es sitio Web dedicado completamente a su background profesional. En la actualidad, comprar una dirección URL no cuesta más de u$s 10 al año. Considere esta opción como una inversión válida en vistas de promocionar su actividad y atraer propuestas laborales.
Después de todo, su intención es posicionarse debajo del reflector más potente. Y tener el control de su identidad online es un buen paso para asegurárselo.
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